Generación perdida: Charlie Sheen y una denuncia que remece

Durante los últimos años Corey Feldman ha remarcado su mirada sobre Hollywood y el que a, su juicio, es el mayor de sus males: la pedofilia.

De hecho, en 2017, en el amanecer del MeToo, tras revelarse las primeras denuncias en contra del productor Harvey Weinstein, el actor de películas como Los Goonies (1985) subió a sus redes un video en que anunciaba el inicio de una campaña para desenmascarar a la supuesta red de pedófilos de la industria. Con fecha de 25 de octubre de ese año, en Twitter comenzó un proceso de recaudación de fondos -US$ 10 millones en total- para realizar un documental acerca del tema.

Luego de más de dos años y un proceso que incluyó diversas demoras -que justificó en que "nadie quiere perseguir a los malos"-, Feldman mostró por primera vez su filme este lunes en Los Angeles, ante una audiencia que incluyó a la actriz Rosanna Arquette y el músico Dave Navarro.

Y a raíz de ese debut, dos nombres de Hollywood volvieron a ubicarse en la palestra: Charlie Sheen y Corey Haim.

La cinta lleva por título (My) Truth: The rape of two Coreys y sitúa a Sheen como responsable de haber abusado sexualmente de la joven estrella de los 80, en medio del rodaje de la película

Lucas, en 1985, cuando el primero tenía 19 años y Haim 13. Una historia que no es primera vez que se menciona, pero que nunca antes había salido con ese nivel de detalle de la boca de Feldman, director, guionista y financista del proyecto, quien venía de declarar en febrero a The Guardian que su amigo "antes de morir me hizo prometer que diera a conocer la verdad".

En el documental, uno de los testimonios que respaldan esa versión corresponde a Susannah Sprague, exesposa de Feldman.

"Él (Haim) me compartió que fue violado cuando era niño en el set de Lucas (...) Me dijo que era su coprotagonista y que fue Charlie Sheen quien lo hizo", comenta en el filme, según recoge Entertainment Weekly.

Feldman detalla en el relato la primera conversación que sostuvo con su colega y coetáneo, amigo suyo desde Generación perdida (1987), compañero de elenco en otra tríada de películas y con quien incluso protagonizó el reality show The two Coreys, entre 2007 y 2008, dos años antes de su muerte por neumonía. "En algún momento durante las filmaciones me explicó que un hombre adulto lo convenció de que era perfectamente normal que los hombres mayores y los chicos más jóvenes en el negocio tuvieran relaciones sexuales, que eso era lo que todos los 'muchachos hacen'", indica sobre lo que habría ocurrido en medio de la realización de Lucas, película dirigida por David Seltzer (guionista de La profecía), que además fue el primer rol en cine de Winona Ryder, en ese momento de la misma edad de Haim.

Ante el estreno del nuevo documental, Charlie Sheen negó tajantemente la versión a través de un representante. "Estas acusaciones enfermas, retorcidas y extravagantes nunca ocurrieron.

Punto", señaló a través de su intermediario la otrora estrella de la serie Two and a half men, prácticamente retirada de la actuación luego de años de escándalos de diversa índole. "Llamo a todos a considerar las fuentes y a leer lo que tiene que decir su madre, Judy Haim", agregó sobre la mujer que ha desacreditado constantemente a Feldman.

Ya en 2017 el hijo de Martin Sheen tomó acciones legales cuando la revista People publicó un artículo con los mismos detalles del relato de Feldman, aunque esa vez a partir del testimonio del actor Dominik Brascia, amigo cercano de Haim. Sheen las emprendió en contra de él en su arremetida por desmentir los hechos.

Irónicamente, ahora Brascia es parte del grupo de hombres que el documental de Feldman también menciona entre sus abusadores.

El actor de Cuenta conmigo (1986) señala en su filme que este habría abusado sexualmente de Haim, mientras que también apunta por primera vez con nombre y apellido al actor Jon Grissom, al manager Marty Weiss y al propietario de un club nocturno, Alphy Hoffman, como sus abusadores.

Al mismo tiempo, Feldman ha acaparado críticas por haber defendido durante años la figura de Michael Jackson, amigo suyo desde su época de gloria en el cine, y con una imagen deteriorada desde el estreno del documental de HBO Leaving Neverland.

Aunque ha matizado su opinión sobre el cantante e insiste en que jamás fue abusado por él, lo último que comentó fue que "no puedo en buena conciencia defender a nadie acusado de crímenes tan horrendos".