No fue un trance fácil para Marcela Castro: la cantante que encabezó Saiko entre 2007 y 2009, en reemplazo por esos años de Denisse Malebrán, acumula desde hace unos años una ascendente carrera como DJ en circuitos extranjeros y la semana pasada debió estar varada dos noches en el aeropuerto de Bangkok como consecuencia de la crisis por el coronavirus.
¿La razón? Tiene doble nacionalidad e intentó ingresar a Tailandia con su pasaporte italiano, uno de los países más golpeados por la pandemia. "No estaba muy clara la situación con los italianos, busqué y me di cuenta que no decía que no se podía entrar, solo para la gente que provenía de Italia, y como yo no había estado en Italia me fui a Tailandia", afirma la artista que hoy se presenta como DJ Thais. Después añade: "Cuando voy llegando me entero de que habían cancelado las visas para todos los italianos solamente por el pasaporte".
Luego agrega que al arribar a Bangkok, donde iba de vacaciones tras tocar en otros lugares de la región, la llevaron a una pequeña pieza con colchonetas junto a un grupo de italianos, indios y coreanos, les retuvieron sus documentos, sus equipajes y les dijeron que debían esperar. "Me llevaron presa para deportarme como a cualquier criminal, gracias a Dios me encontré con este grupo de italianos; nos llevaron a ese calabozo, por lo menos el lugar estaba limpio, no podíamos ir a comprar agua sin tener dos guardias de seguridad", señala Castro.
Las autoridades tailandesas les dieron la oportunidad de irse a Italia, pero debido a la crisis humanitaria que está viviendo el país, no podían comprar un vuelo directo. "No había ninguna otra opción, Italia estaba cerrado. Tuve que pagarme los pasajes y nos mandaron por Rusia como escala", relata. "Yo estaba desesperada, me puse a llorar en el aeropuerto". Tras dos días durmiendo en el aeropuerto de Bangkok, partió a Rusia, hizo escala en Italia y ahí la espero la policía.
"En el aeropuerto de Roma no había nadie, era un lugar desierto, todo cerrado y todos con máscaras de seguridad", confirma la vocalista; ella planeaba irse a Berlín y no pudo, perdió 350 euros, por lo que su única opción fue partir a Chile para ese mismo día. Llegó finalmente el martes 17 a Santiago, un día antes que se cerraran las fronteras. Hoy está en cuarentena. "Fue una sensación de no tener nadie que te defendiera, un desamparo total" .