Fue un año completo de celebración dedicado a Nemesio Antúnez (1958). A partir de mayo del 2018, la figura de quien fue pintor, arquitecto, grabador, fundador del Taller 99 y director del Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA), se relevó a través de distintas actividades culturales para conmemorar su centenario. En ese contexto, entre abril y junio del año pasado el MNBA y el MAC se unieron en Antúnez Centenario, una gran exposición que abordaría, a través de tres distintas muestras el legado de Nemesio Antúnez.

Una de esas exhibiciones fue Manifiesto, una retrospectiva visual curada por Ramón Castillo, que reunió alrededor de 100 obras de Nemesio Antúnez: óleos, grabados, acuarelas, bocetos, documentos y archivos fotográficos. Esa investigación y guión curatorial de la muestra se desarrolló en extenso en el libro Nemesio Antúnez, que acaba de ser publicado por la Fundación Nemesio Antúnez y que está disponible para descarga digital gratuita a través de su sitio web.

“El libro busca mostrar un panorama completo de las investigaciones que estuvo haciendo Nemesio Antúnez”, cuenta Ramón Castillo. “Nos vamos a encontrar con un Nemesio Antúnez que estaba investigando acerca de 10 temas con los que trabaja a lo largo de toda su vida y esos temas se van reencontrando en distintos momentos”, añade. Por ello el nombre que Castillo da al texto que estructura el libro, Manifiesto de una poética circular, ya que el artista vuelve sistemáticamente a trabajar en las distintas temáticas tan reconocibles en su obra: la iconografía popular de Quinchamalí, la geografía, los estadios y espacios públicos, entre otras.

La publicación fue realizada en conjunto con la Fundación Nemesio Antúnez, y se logró con el apoyo de LarraínVial, la Ley de Donaciones Culturales y con la gestión de la Corporación del Patrimonio Cultural de Chile. Un trabajo colectivo “muy en el espíritu de Nemesio”, dice Castillo.

“La gracia del libro era poner todo ese material que investigó Ramón y también exponerlo más a través del archivo, de manera más visual, con fotos de Nemesio. Es otra forma de plantear el mismo material”, señala Guillermina Antúnez, hija del artista.

Este es el primer libro de la Fundación Nemesio Antúnez que aborda de manera tan extensa la obra del artista. Además de su trabajo pictórico, el enfoque se centra en mostrar todas las facetas de un personaje que no solamente fue reconocido como creador, sino que también de manera más masiva como comunicador en su programa Ojo con el Arte.

“Es valioso destacar que en el libro hay un esfuerzo por presentar a Nemesio Antúnez no solo como un pintor, sino también intelectual, entonces él va pensando y tiene una cantidad importante de texto que van apareciendo citados en el libro porque muestran a un Nemesio Antúnez que no solo pinta un tema sino que reflexiona también sobre ese tema”, explica Castillo.

En efecto, el archivo que alberga la Fundación Nemesio Antúnez y que es parte de este libro, da cuenta de un artista que además de crear también registraba sus procesos y la repercusión mediática que había en torno a su figura. Escribía sobre sus ideales y guardaba todo el material que salía en prensa sobre él. A ello, el archivo de la fundación suma imágenes que lo muestran en distintos contextos de su trabajo como pintor y como director del Museo Nacional de Bellas Artes, y también fotografías y series completas de sus obras.

“En la exposición hicimos un trabajo grande del tema de museografía, porque como familia también tenemos varios de esos valores y lo estético era esencial. Entonces en el libro también era muy importante eso”, comenta Guillermina Antúnez sobre la visualidad del libro que cuenta con gran cantidad de fotografías.

Si bien en la publicación se pueden reconocer algunos de los aspectos más visibles de Nemesio Antúnez y su obra, Ramón Castillo señala haber descubierto otros aspectos de la personalidad del artista a través de la investigación que llevó a a la exposición Manifiesto y a este libro.

Uno de esos puntos tiene que ver con la dificultad que se le presentaba ocasionalmente a Nemesio Antúnez al crear arte. “A él lo conocemos siempre con ese espíritu de positividad y de un artista que todo el tiempo está animando el trabajo creativo, pero descubrí que Nemesio lo pasaba mal también creando arte, en el sentido de la sensibilidad que él tenía: la realidad lo afectaba. No le salía fácil pintar”, comenta.

También está su faceta más conceptual, donde comienza a pintar y abordar las grandes dimensiones. “Pone en duda la posibilidad de medir aquello que está pintando, empieza a trabajar sobre temáticas que hablan de lo monumental”, explica Castillo.

Todo eso además de un extenso archivo fotográfico es lo que reúne el libro que puede ser descargado en el sitio fundacionnemesioantunez.org.