Jesse Eisenberg tenía 27 años cuando interpretó a Mark Zuckerberg, creador y dueño de Facebook, una de las empresas más rentables de la era moderna con 2.6 billones de usuarios activos al mes, lo que lo posicionó como el billonario más joven del mundo en 2007 -puesto que actualmente ocupa Kylie Jenner (22)-.
The Social Network (2010) dirigida por David Fincher, retrata la creación de Facebook desde que un Mark Zuckerberg de 19 años -encarnado por Jesse Eisenberg- creó una red social llamada Face Mash -comparando mujeres estudiantes en Harvard- para posteriormente transformarla en el negocio de su vida.
La vida al interior de campus universitarios, las disputas con quien fuera su amigo -Eduardo Severin-, la demanda por parte de los hermanos Winklevoss y la fe ciega en Sean Parker -fundador de Napster y actual inversor en Spotify-. Todo en el marco del nacimiento de una de las redes sociales y empresas más importantes del mundo
Con el guión de Aaron Sorkin y la banda sonora original de Trent Reznor y Atticus Ross, The Social Network es una cinta aclamada por la crítica que significó para Jesse Eisenberg uno de los papeles más importantes -a la fecha-, y para Mark Zuckerberg un retrato en la pantalla grande que no lo deja en una buena posición.
No fue un camino fácil para Eisenberg, y esta afirmación no alude solo al papel de Zuckerberg, sino a la actuación en general. Hizo teatro infantil a los 8 años, obras en las que tenía que audicionar por un papel específico, pero tenía un lugar asegurado -según relató en entrevista con W Magazine-, pero que al entrar a Hollywood se dio cuenta que así no funciona el mundo real.
“Cuando tenía 14 años trabajé en algunos musicales, pero siempre fui suplente, por lo que en las obras actúe exactamente 1 vez en cada una cuando alguien estaba muy muy enfermo”, dijo a W. ¿Su motivación para dedicarse a la actuación? Ser parte de algo.
“Comencé a actuar para ser parte de un grupo porque me sentía excluido en el colegio. Me daban lo mismo las críticas, solo quería sentirme parte de un grupo de personas” confesó. “Incluso si yo no estaba en una posición que me gustara estar. Al menos sabía que ese era mi lugar y aprendí a sentirme cómodo con ello”, agregó, revelando que la elección de su carrera tenía un sentido de búsqueda de pertenencia más que un sentimiento de vocación.
De Eisenberg a Zuckerberg
Cuando Jesse leyó el guión de Aaron Sorkin, tuvo acceso a cuatro escenas de la película. “Pensé que era un personaje fascinante”, dijo. Grabó un video con el material que tenía en sus manos, envió el registro a California al día siguiente, y viajó a Seattle.
Desde la ciudad del grunge contactó a su agente contándole que envió su audición en video al equipo de producción de “la cinta de Facebook”, pero que necesitaba recuperarla. Sentía que no lo hizo bien. Sin embargo, su agente le dijo: “Ya recibí una respuesta de ellos, tienes que viajar inmediatamente a California para reunirte con David Fincher”, dijo a W.
En el proceso de preparación, Eisenberg recopiló fotos, videos y entrevistas, todo lo que pudiese encontrar sobre Mark Zuckerberg, pero no con la intención de imitar, sino de complementar aquel personaje creado por Aaron Sorkin.
“Sentí que el personaje estaba tan bien construido, es enigmático y a la vez comprensible. Actúa de una forma que hiere a los otros en la cinta, pero al mismo tiempo quiere conectarse y no sabe cómo. Es un personaje único y complicado”, explicó en entrevista con College Movie Review.
Es que el rol de un joven que manejaba al dedillo la programación y que pretendía crear una red de conectara perfiles de millones de personas, era algo extraño para un actor que incluso se crió sin televisión. Recién al postular al papel se conectó a Facebook para ver en qué consiste la famosa red social.
Es más, según confesó a Ellen Degeneres, no tiene una cuenta de Facebook. Alguna vez se hizo una cuenta, pero al ver que el algoritmo le sugería como amiga a una compañera de colegio de su hermana, entró en pánico y la cerró.
La primera escena de The Social Network -una de las más polémicas al ser negada como real en más de una oportunidad por Zuckerberg- fue grabada 99 veces, según detalla Eisenberg a College Movie Review. Esto, por el perfeccionismo de Fincher.
“Mark no se siente feliz interactuando con personas por lo que crea una zona de confort, un ambiente en el que puede tener las versiones ideales de las relaciones. Al comienzo, tiene problemas con un simple diálogo entre dos personas, primero cuando habla con la chica con la que estaba saliendo, y luego cuando escribe su blog [y la destruye]”, analizó Eisenberg conversando con The Guardian en 2010.
“Realmente lo veo como un artista. Y si lo ves de esa forma, mucho de lo que él hace no solo es defendible, sino también necesario” expresó sobre su personaje. “Como actor, si llego tarde a algún lugar o digo algo excéntrico, es totalmente aceptable. No solo eso, soy elogiado de una forma perversa. Ya que Mark es un hombre de negocios, no se le da la misma libertad de acción”.
“Pero si sustituyes Facebook por la Mona Lisa, entonces todo en la película tiene una luz diferente. Se deshace de su amigo porque tiene que proteger su pintura: creo que todos entenderían eso”, ejemplificó el actor que actualmente tiene 36 años.
¿Mark Zuckerberg vio The Social Network?
Mark Zuckerberg sí vio The Social Network. Lo dijo él mismo en varias entrevistas -incluyendo una participación en SNL junto a Jesse Eisenberg y Andy Samberg -quien lo interpretaba en dichos sketches-; y lo mencionó el protagonista de la cinta revelando una anécdota familiar.
Un primo de Jesse Eisenberg trabaja en Facebook, y según él mismo le contó por mensaje de texto, el viernes de estreno de The Social Network, Zuckerberg arrendó una sala de cine para verla junto a sus empleados. “Dijo que lo hice bien”, reveló Eisenberg a Indie London según lo que su primo escuchó decir a su jefe. Pero parece ser un comentario políticamente correcto.
En conversación con Business Insider, fue inevitable preguntarle por sus impresiones de la cinta que muestra cómo nació su mayor creación. “¿Dónde comenzar?”, dijo riendo junto a la audiencia.
“Son interesantes las cosas en las que sí fueron precisos, por ejemplo, cada una de las poleras que mostraron, realmente las tengo”, confesó refiriéndose al trabajo de vestuario de la cinta. Pero fue el único halago.
“Hay varias cosas que no fueron así, y por otro lado, muchos detalles que recrearon bien. Dentro de las cosas que no ocurrieron, está el marco en el que se desarrolla todo. Comienza con esta chica que me deja -que no existió en la vida real- pero que sí me pasó muchas veces. Y básicamente lo muestra como que todo el motivo para crear la red social fue para conseguir chicas o una suerte de institución social”, desmiente en tono de reclamo.
“Las personas que me conocen saben que he salido con la misma chica -Priscilla Chan- desde que creé Facebook. Creo que es una idea distorsionada de lo que la gente cree que hacemos en Silicon Valley al crear cosas. Como que no conciben la idea de que construyan cosas simplemente porque les gusta hacerlo”, expresó.
En la primera sesión pública de Q&A en la sede de Facebook en California (2014), Zuckerberg fue más duro con la cinta de David Fincher. Claro que en ningún momento tocó la interpretación de Jesse Eisenberg.
“No he pensado en esa película en mucho tiempo. En cierta forma la bloqueé de mi mente”, dijo según reportó The Guardian. “Creo que la realidad es que escribir códigos y construir un producto y crear una compañía, no es lo suficientemente glamorosa para hacer una película. Así que puedes imaginar que muchos de los sucesos deben ser adornados o maquillados”, dijo el empresario.
“Siguieron su propio camino en la película para intentar obtener correctamente detalles interesantes como el diseño de la oficina, pero el global de la trama… inventaron muchas cosas, lo que considero doloroso”, confesó ante los asistentes.
En conversación con la revista W, Jesse Eisenberg empatizó con Zuckerberg, curiosamente expresando que no podría estar en sus zapatos.
“No he escuchado de Mark Zuckerberg, espero que esté muy bien” dijo en 2011, cuando aún no había tenido la oportunidad de conocerlo. “Imagino que es una experiencia incómoda y él ha lidiado con esto de una manera superior a lo que yo podría hacer. Cuando leo algo sobre mí, me torturo por semanas, y me imagino que debe ser muy incómodo para cualquiera el lidiar con una película hecha sobre ellos”.