Gustavo Fring es un villano peculiar. Dueño de un restaurant de pollo frito -al estilo KFC- en Albuquerque, Nuevo México, siempre atiende a sus clientes con una sonrisa y muestra una imagen pulcra. Pero el empresario negocia con más que simple pollo frito.
Su cadena de comida rápida es una fachada para su imperio local de narcotráfico. Incluso ofrece ayuda cuando la familia Salamanca hirió gravemente a unos agentes de la DEA. Fue cuestión de tiempo para que se interesara en la producción casera de metanfetaminas que Walter White y Jesse Pinkman traían entre manos.
El pollo frito de Los Pollos Hermanos es mencionado varias veces a lo largo de Breaking Bad, así como también en el spin-off Better Call Saul. Por lo que en el recetario de Culto, no podía faltar este plato seriéfilo.
Ingredientes
- 12 trutros de pollo sin cuero
- Ajo
- Ají
- Pimienta
- Sal
- Harina
- 4 huevos
- Aceite
Preparación
1. En un mortero (o recipiente que guste el chef) moler y mezclar el ajo con el ají, pimienta y la sal, hasta formar una pasta.
2. En un bowl, bañar los trutros de pollo con la pasta hecha en el paso anterior y dejar reposar durante 30 minutos.
3. Enharinar los trutros de pollo y retirar el exceso de harina.
4. En un recipiente aparte, batir los 4 huevos. Pasar las presas de pollo enharinadas por los huevos batidos y luego pasar nuevamente por harina. Dejar reposar durante 10 minutos.
5. En un sartén profundo, calentar aceite y -una vez caliente- comenzar a freír los trutros de pollo.
6. Ir colocando las presas fritas en un plato con papel absorbente.
7. Disfrutar.
Bonus: meta-dulces
No, no te vamos a enseñar a hacer metanfetaminas. (¿Qué esperabas?). A continuación dejamos la receta para dulces que se asemejan -solo en apariencia- a la droga que moviliza la trama de Breaking Bad. Un truco que sirve para animar un día más en casa o bien una fiesta temática.
Ingredientes
- 1 kg de azúcar
- 1 litro de agua
- 1 cucharada de esencia de vainilla
- Colorante azul
- Bandeja y martillo
Preparación
1. En una olla poner el litro de agua al fuego.
2. Cuando el agua esté punto de hervir, echar el azúcar, la esencia de vainilla y el colorante.
3. Cuando comience a hervir nuevamente, bajar el fuego y dejarlo por 25 minutos, revolviendo constantemente para que el azúcar no se pegue en el fondo.
4. Transcurridos los 25 minutos, verter el contenido en una bandeja. Una vez que esté a temperatura ambiente, dejar la bandeja en el refrigerador por al menos 3 horas (mejor si se deja de un día para otro).
5. Sacar la bandeja del refrigerador y golpear el dulce con un martillo hasta obtener trozo pequeños (o del tamaño que gusten).
6. Disfrutar.