“Tenet es una película de Bond que exprime Back to the Future 2 y Edge of Tomorrow”: las primeras críticas a la cinta de Christopher Nolan
Era julio de 2017 cuando en los cines se proyectaba Dunkirk, la décima cinta de Christopher Nolan a tres años de dirigir Interstellar, y solo un año después de trabajar en la producción ejecutiva de Batman v Superman: Dawn of Justice.
Fue en el marco promocional del drama bélico -centrado en el escape de los soldados británicos de la bahía francesa tras ser conquistada por los nazi-, que Christopher Nolan hizo algunas críticas a las producciones cinematográficas de servicios de streaming como Netflix.
“Lo que ha definido siempre una película es que se vea en una sala de cine. Ni más ni menos. Así que el hecho de que Netflix esté haciendo películas para televisión y que compitan en los Oscar o en el Festival de Cannes sólo significa que utiliza el cine como un arma de promoción”, dijo Nolan en una entrevista concedida a El Mundo.
Dichos expresados previo a la nominación en 2020 de cintas como El Irlandés, Historia de un matrimonio y Los dos Papas, y el triunfo en 2019 de Roma de Alfonso Cuarón; todas producidas y difundidas en Netflix, con la proyección en algunas salas.
Dos años y medio han transcurrido desde tal crítica. Existen más servicios de streaming -como Disney+, Apple TV+ y HBO Max-, y en el marco de la pandemia de coronavirus, estos se han convertido en la primera -y a la fecha, únicas plataformas- que dan a conocer ciertas producciones que se enfrentaron al cierre de salas de cine.
Mulán, por ejemplo, tras postergar su debut en la pantalla grande por los dichos de la actriz apoyando la represión policial en la protestas de Hong Kong, y otro cambio de programación debido a la pandemia; Disney finalmente decidió lanzar su cinta live action en Disney+ en septiembre (por un valor extra a la suscripción de $30 dólares).
No es un caso lejano, en Chile el debut de la cinta Tengo Miedo Torero también será vía streaming en una función única tras su presentación en el Festival Internacional de Cine de Cannes.
La obra de Christopher Nolan no estuvo exenta de la discusión a nivel industria. El cineasta británico tenía entre manos el estreno de su décima primera cinta titulada Tenet, una historia protagonizada por John David Washington (El infiltrado del Ku Klux Klan) y Robert Pattinson (The Batman, Twilight); cuando comenzaba a expandirse por el mundo el virus denominado COVID-19.
Sin embargo, tras varios aplazamientos (17 de julio, 31 de julio, 12 de agosto) finalmente se fijó su estreno en salas de cine para el 26 de agosto, eso sí, en Reino Unido, España, Australia, Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Corea del Sur y Rusia. Y paulatinamente en otros lugares del mundo de acuerdo a la apertura de teatros. Por ejemplo, en Estados Unidos está prevista para el 3 de septiembre.
Las primeras impresiones de Tenet
Como es común en cada nueva cinta o serie, la crítica especializada ya pudo acceder a la cinta y dar a conocer sus impresiones. Por ejemplo, en sitios web dedicados a la evaluación de producciones, rankean Tenet con un 83% (Rotten Tomatoes), 8.4/10 (IMDb) y 72% (Metacritic). En Culto seleccionamos las reseñas más relevantes.
“Tenet se siente como un híbrido entre una película clásica de Bond llena de acción y una ciencia ficción que cambia el tiempo, y si ninguno de los géneros se sienta muy bien con el otro, tal vez no esté destinado a hacerlo. Si bien es un The Protagonist (John David Washington) es agente extremadamente capaz, nuestro héroe está tanteando su camino, tratando de aprender en el trabajo, y nosotros nos rascamos la cabeza junto con él. A pesar de la distracción de los yates de lujo, los adornos glamorosos, y las espectaculares piezas de acción, hay una inquietante pregunta de “¿WTF?” a lo largo de Tenet. Es una pregunta que atraerá al público o no. Es posible que el diálogo muy expositivo no atraiga al público de las palomitas de maíz, pero los fanáticos de Nolan deberían disfrutar de la oportunidad de decodificarlo en múltiples visualizaciones. No se desperdicia ni un destello de detalle o una línea de diálogo; como un espía, depende de usted mantener los ojos y los oídos abiertos y captar las muchas pistas a medida que surgen de manera espesa y rápida”, escribió Anna Smith para Deadline.
“Tenet es absurdo en la tradición del Point Blank de Boorman, o incluso del Zabriskie Point de Antonioni , un jeu d’esprit inexpresivo, una cadencia cerebral, un florecimiento inexpresivo de inverosimilitud loca, pero sobrecargado con energía esteroidea e imaginación. En lo que respecta a los rascadores de cabeza, es un triturador de cuero cabelludo, un destrozador de cráneos. Pero es gloriosamente ambicioso y salí tambaleante del cine, quitándome la mascarilla mareado por el vértigo de Nolan. (La gente también usa máscaras faciales en la película). También tiene momentos de ingenio inexpresivo, surrealismo y estilo, y Robert Pattinson puede haber hecho que el traje cruzado sea aceptable una vez más en la sastrería masculina”, opinó Peter Bradshaw para The Guardian, y agregó: “Quizás Tenet no sea finalmente tan desafiante como su otro disruptor temporal, la primera obra maestra Memento de 2000, pero hay momentos tan asombrosos en ella: escenas de pelea a puñetazos simétricamente recurrentes, revisitadas desde diferentes puntos de vista, en las que los combatientes aparentemente están gobernados por diferentes flujos de tiempo: uno hacia adelante, otro hacia atrás. No debería tener sentido. No tiene sentido. Lo que hace es un cine asombroso”.
“A menudo [Nolan] ha dicho que le gustaría dirigir una película de Bond, pero debe haberse cansado de esperar a que los productores lo contraten, así que ha seguido adelante y ha hecho una propia. Desde su escena de acción de apertura, hasta su recorrido por lugares de belleza internacionales, hasta su chico malo súper rico y con mucho acento con un ejército de secuaces prescindibles, Tenet sigue la fórmula 007 al pie de la letra, siendo el único cambio notable que el papel principal se ha dividido en dos, con Washington interpretando al duro y dedicado agente del gobierno, y Pattinson agregando el acento inglés, el humor despreocupado y el gusto por el alcohol”, apuntó Nicholas Barber de BBC. “Básicamente, Tenet es una película de Bond que exprime Back to the Future 2 y Edge of Tomorrow en su última media hora”.
Jessica Kiang, escribió en su reseña para The New York Times que la cinta “deslumbra los sentidos, pero no conmueve el corazón, una crítica común a todas las películas originales de Nolan. Y otros puntos ciegos de Nolan ampliamente reconocidos también están en evidencia: es deprimente que una actriz tan buena como Elizabeth Debicki deba cargar con un papel tan cifrado, darle un hijo en lugar de un personaje y ser responsable de las únicas malas decisiones de la historia. Todos los demás actúan a la perfección, especialmente el protagonista sin historia de Washington que demuestra que no todos los superhéroes usan capas” y añadió a continuación una observación en concordancia con sus colegas: “es básicamente James Bond, hacia adelante y hacia atrás, una especie de 00700, hasta en alguna que otra frase irónica”.
Desde Variety, Guy Lodge califica la cinta como “grande, descaradamente hermosa y grandiosamente disfrutable que brindará socorro a un público hambriento durante mucho tiempo de un espectáculo escapista en esta robusta escala hecha para Imax”, pero hace una suerte de advertencia en medio de la espectacularidad. “Sin embargo, no es una película con mucho que decir sobre el mundo real en el que finalmente está entrando, o de hecho, sobre el elaborado reordenamiento del mundo en la víspera de la destrucción que ha ideado en la pantalla”, y más adelante explica que “Tenet engaña al thriller de espías con parámetros de ciencia ficción ampliados para volver a esos temas favoritos. Una vez más, sus reflexiones están arraigadas más en la física que en la filosofía o la psicología, con el gancho de la película: que puedes cambiar el mundo no viajando en el tiempo, sino invirtiéndolo, explorado en términos de cómo funciona, no de los cómo los hace sentir”.