Este martes, el líder supremo de Irán, Alí Jameneí, denunció que la publicación de caricaturas del profeta Mahoma en la revista satírica francesa Charlie Hebdo es un “pecado imperdonable” y una muestra del “odio” de occidente hacia el islam.
“El pecado imperdonable de una revista francesa al insultar el santo rostro del profeta reveló una vez más el odio y la hostilidad de las instituciones políticas y culturales del mundo occidental contra el islam y la comunidad musulmana”, dijo a través de un mensaje publicado en su sitio web oficial y reproducido por la agencia EFE.
“La excusa de la libertad de expresión para no condenar este gran crimen es completamente errónea y demagógica”, condenó.
Luego siguió: “Este movimiento también podría ser una medida para distraer a las naciones y gobiernos de Asia occidental de los siniestros complots de Estados Unidos y el régimen sionista (Israel) contra la región”.
Según Jameneí, “las naciones musulmanas, especialmente las de Asia occidental, deben mantener la vigilancia sobre los problemas de esta sensible región y nunca olvidar la hostilidad de los políticos y líderes occidentales hacia el islam”.
Las caricaturas
Charlie Hebdo volvió a publicar a comienzos de septiembre unas burlescas caricaturas del profeta Mahoma con motivo del inicio del juicio contra los yihadistas que atacaron la redacción del semanario en 2015, asalto que acabó con la vida de 12 personas.
La revista recalcó que no se “doblegará” jamás, pese a que, debido a esas viñetas, estaba amenazada desde 2006 y sufrió el violento atentado.
En el pasado, Irán adoptó una postura muy radical contra lo que considera ofensas al islam. El ayatolá Ruholá Jomeiní, líder de la Revolución Islámica, emitió en 1989 una fatua de muerte contra el escritor anglo-indio Salman Rushdie por su libro Versos satánicos.