Hace aproximadamente un mes la vida cultural en Uruguay volvió a activarse. Las salas de teatro y cines reabrieron sus puertas tras el buen control que ha tenido la pandemia en el país que hoy cuenta con poco más de 200 casos activos.
El dramaturgo y director uruguayo Gabriel Calderón fue uno de los primeros en volver a las tablas cuando comenzó a permitirse. El 28 de agosto estrenó Ana contra la muerte en la Sala Hugo Balzo de Montevideo. Con entradas agotadas la obra marcó el comienzo de la reapertura de los teatros en la ciudad uruguaya.
“Ha sido una situación bien particular por el tamaño del país, que permite tener un control bastante fehaciente y articulado con el comportamiento de la población”, dice Gabriel Calderón sobre la situación sanitaria de su país.
En diciembre del año pasado Calderón y su elenco hicieron un pre estreno de Ana contra la muerte, que logró buenas críticas. El estreno estaba programado para abril de este año, sin embargo con la pandemia los planes se suspendieron. Con la apertura de los teatros en Montevideo la obra llegó finalmente a sala y este fin de semana (hoy y mañana) será transmitida en vivo a través de la plataforma de la Fundación Teatro a Mil: www.teatroamil.tv.
Varias cosas se conjugaron en la creación de esta nueva obra. Una era la búsqueda del creador de renovar su lenguaje teatral, otra fue la noticia sobre una madre que comienza a contrabandear droga para costear el tratamiento de su hijo con cáncer, y la tercera la participación de las actrices Gabriela Iribarren, María Mendive y Marisa Bentancur.
“Las actrices son tres locomotoras teatrales. Yo tenía una deuda con ellas que era hacer algo juntos. No era que no lo hubiese intentado antes, sino que nunca había encontrado el material más justo. Cuando estaba rumiando esta obra en mi cabeza me pareció que era con ellas. De hecho escribí la primera escena, se las leí, y le dije que si ellas me decían que sí, yo la escribía. Es muy difícil hacerlo mal con estas tres mujeres, fue la fortaleza que busqué para atravesar los riesgos que pensaba asumir”, cuenta Calderón.
Con un tono distinto al que Gabriel Calderón ha presentado en sus anteriores obras, Ana contra la muerte relata la historia de una madre que vive en la pobreza y que lucha por salvar a su hijo del cáncer. La obra además opta por una puesta en escena simple que da predominancia al texto y las actuaciones de las actrices.
“Había cierto cansancio del lenguaje que yo venía trabajando y sentía que no estaba logrando expresar ciertas cosas con el lenguaje del humor, la ciencia ficción y los temas políticos. Desde hace unos años estaba buscando nuevos materiales que tensaran mi escritura. Cuando encontré la historia de esta madre que termina presa en otro país y la liberan para que vaya a ver la muerte del hijo, en toda esa condensación épica de una mujer, me parecía que yo podía encontrar ese camino, seguirla a través de todas las conversaciones que tenía e intentar probar algo así como un nuevo lenguaje”, explica el dramaturgo.
Si bien la idea era estrenar y tener a disposición el texto de la obra a la venta, el libro de Ana contra la muerte fue publicado antes de la llegada al teatro, por editorial Criatura. Fueron mil ejemplares editados, que ya están por agotarse, y que sirvieron como adelanto de lo que el público vería en el escenario cuando se estrenara la obra.
“Es verdad que una parte de la lectura viene del propio mundo del teatro, pero este libro sobre todo me ha mostrado que hay mucha gente que incluso no iba a ir al teatro y va luego de leer la obra. Son pequeños públicos si uno los compara con los bestsellers y con los grandes números de las editoriales, pero para el mundo del teatro no es nada despreciable”, comenta.
Ana contra la muerte estará disponible hoy a las 21.00 y mañana a las 20.00 horas, en la plataforma www.teatroamil.tv. Las entradas tienen un valor de $ 4.000 y se pueden adquirir a través del sistema Ticketplus.