Hollywood tuitea y apoya a Biden, pero no es un actor relevante de la lucha electoral

Representando el sentimiento de un país entero y probablemente el de buena parte del mundo, al actor Mark Ruffalo pasada la medianoche del martes recurrió a su cuenta de Twitter para escribir: “Amigos, respiren profundamente”, alertando sobre el conteo de votos que restaba en algunos estados cruciales de Estados Unidos.

Una hora antes, la cantante Katy Perry subió a sus redes un par de imágenes insistiendo en un mensaje que se había instalado en la previa a los comicios presidenciales: “Cada estadounidense cuenta. Cada voto cuenta”.

En medio de la tensión que marcó la noche de este martes –y que continúa ante los inciertos resultados en estados claves del país– el intérprete de Avengers y la artista pop fueron dos de las celebridades que marcaron la pauta de Hollywood y el mundo del entretenimiento en su reacción al estrecho margen que todavía separa a Donald Trump y Joe Biden.

Una disputa por ocupar la Casa Blanca por los próximos cuatro años que empujó como nunca a cantantes, actores y famosos a usar su plataforma para incentivar el voto durante los últimos meses. Incluso grandes figuras totalmente esquivas a otorgar de manera pública apoyo a un candidato en específico esta vez sí expresaron una preferencia clara: Biden y la senadora Kamala Harris.

La cantante Taylor Swift y el actor Dwayne Johnson –dos de los nombres que más millones facturan y más arrastre generan en sus ámbitos– así lo manifestaron con meses de anticipación, y entregaron mensajes hasta último momento a sus seguidores para que participaran en la elección, “una de las más importantes de nuestra historia”, como se preocuparon de subrayar muchos nombres célebres durante este año.

Swift, que hasta 2018 mantenía bajo completo hermetismo su posición política –sobre lo que profundizó en su documental Miss Americana–, fue más allá en su compromiso, facilitando los derechos de su canción Only the young para la campaña de Biden y Harris, como un llamado a que la juventud se involucrara en el proceso.

Así, en una abrumadora mayoría, probablemente más que en 2016, el respaldo de Hollywood fue a la fórmula demócrata. Eso sí, la reñida lucha que mantienen Trump y Biden hace preguntarse si, como hace cuatro años, ese entusiasmo chocará de nuevo de golpe con las preferencias de los estadounidenses, tal vez más proclives a extender el período del empresario y candidato republicano, que a lo que pueda hacer el exvicepresidente de Barack Obama, pese a cualquier expresión de los famosos.

Si por entonces parte del análisis residió en el tardío apoyo desde el mundo de las estrellas a Hillary Clinton–al contrario de Obama, que firmó un armonioso vínculo entre respaldo popular y el abrazo de los grandes nombres de la industria unidos tras el “Yes we can”–, ahora el candidato demócrata contó con un voluminoso contingente de astros implicados en las más diversas formas. Hasta el elenco de la superproducción Avengers: Endagme, la película más millonaria de la historia, se reunió virtualmente con Harris para reunir fondos y estimular la participación.

En el peso de nombres que estuvieron en los cierres de campaña no hay comparación: Biden sumó en su evento en Pensilvania a John Legend y Lady Gaga, que además de interpretar algunas canciones, hizo un llamado a los norteamericanos a “vote como si su vida dependiera de ello”. El actual presidente, en su motín en Michigan, invitó al rapero Lil Pump (a quien llamó “Little Pimp”), mientras que entre sus votantes más ilustres se volvieron a anotar los actores Jon Voight y Kristy Swanson.

Un desbalance entre celebridades que –en horas, días o cuando estén los resultados definitivos– mantiene como opción repetir el final de 2016. Por ahora, aún es válido lo que la noche del martes escribió la actriz y directora Elizabeth Banks: “Estoy caminando de un lado a otro. Al menos estoy quemando el galón de helado que acabo de comer”.