Hace poco más de un año, Anitta (27) estaba en Río de Janeiro así: cantando frente a cerca de 100 mil personas que apretujadas como en una batidora coreaban sus canciones e imitaban sus pasos de baile en el escenario central del megafestival Rock in Rio.
Un año después, Anitta también está en Río de Janeiro, pero así: sola desde uno de los rincones de su casa, otorgando entrevistas frente a la pantalla de un computador, mientras afuera la ciudad de la playa y la alegría se ha olvidado por meses de cualquier fiesta, evento o celebración multitudinaria.
“He extrañado los conciertos. Cuando llegaron las primeras noticias del virus me puse muy triste, tenía muchos planes para mi carrera este 2020, pero después noté que no era posible y vi que necesitaba descansar, estar en mi casa, tener un momento para mí. Yo tengo esta casa y nunca había dormido siete días seguidos en ella, por lo que fue importante tener este tiempo, preocuparme de mi salud y de mí misma”, asume la cantante, en conversación hace unos días para el programa Sesiones íntimas de Culto que se emite por La Tercera, revelando entre líneas su condición como la mayor figura pop nacida en Brasil en los últimos años , capaz de hermanar el funk carioca con el pop más global, y de acechar la gran industria anglo a través de colaboraciones con Alesso, Snoop Dog y Cardi B, sin extraviar la conquista de este lado del planeta, cantando con Prince Royce, Arcangel y Caetano Veloso.
Todo en un universo multilingüe (portugués, español e inglés) y que ha alcanzado el streaming con una exitosa serie biográfica en Netflix.
Por eso, como toda buena estrella en su punto máximo de ebullición, la pandemia no ha aplastado sus planes: esta temporada, Larissa de Macedo Machado –su verdadero nombre- igual ha despachado varios sencillos, como Amor real, Me gusta (con Cardi B y Mike Towers), y Tócame (con Arcangel y De la Ghetto).
“Me encanta que mis canciones suenen distintas y no tener una propuesta única. Soy una persona curiosa y me da placer conocer cosas nuevas. No necesitamos definirnos por un sonido. Me pasa con Caetano Veloso, que es un amigo y muy importante en mi vida, que está súper actualizado de todo lo que pasa con música en todo el mundo, no es necesario explicarle”, asegura.
¿Cómo fue enfrentar una pausa cuando su carrera parecía extenderse por los lugares más diversos? Por ejemplo, iba a estar en el festival Coachella de EE.UU.
Yo trabajaba sin valorar mucho mi vida personal, ahora aprendí eso, a valorar mi vida como ser humano. De hecho, siempre estaba “trabajo-trabajo-trabajo”, sin nunca aprovechar las cosas que había logrado en mi carrera. Entonces este año fue de descansar y aprender.
Cuando en 2019 lanzó el disco Kisses, también comentó que no se veía mucho más tiempo haciendo música. ¿Mantiene esa idea?
Amo cantar y ser cantante, pero no es algo que tenga en la cabeza seguir por tanto tiempo, porque es una vida a la que uno necesita dedicarse mucho y yo soy de las personas que prefieren concentrarse cien por ciento en las cosas. Si estoy en la música, estoy en la música. Si estoy en familia, estoy en familia. Esta rutina como artista es muy pegada y también quiero a futuro tener mi momento.
Eso sí, la tranquilidad será transitoria. Para 2021 tiene planificada la salida de su siguiente disco, Girl from Rio, de título sugerente y que precisamente mostrará, según adelanta, su visión personal de lo que es vivir en la ciudad. “La gente tiene una visión muy turística. Pero yo vengo del otro lado, de los barrios más pobres. Entonces quiero contar eso”.
Muchos extranjeros se han armado durante décadas una imagen de Brasil a través de la música de su país. Quizás ahora está pasando eso con muchos jóvenes y usted. ¿Siente una responsabilidad en aquello?
Claro, y también me siento honrada. Hay países más cercanos, como Chile o Argentina, que conocen cómo es Brasil, pero hay otros más lejanos, como España, que no tiene una idea tan clara, porque además está la barrera del idioma. Yo he conversado con todos los artistas que han roto esa barrera, Roberto Carlos, Caetano, Gilberto Gil y otros, y me han dicho que lo importante es enfocarse y dedicarse a trabajar mucho.