“Recuerdo estar sentada, atrapada por el sonido de su voz, esta entrega feroz”, escribe Shirley Manson en una edición especial de Rolling Stone, dedicada a los 100 grandes artistas de todos los tiempos. “Más tarde —continúa— me llamó la atención cuán literarias eran sus letras, cuán intelectuales y políticas”.
Manson cuenta que le encantó como, en sus canciones, sobre todo de Horses (1975), ella hablaba de cualquier otra cosa que del amor en su corazón por un hombre. “Y me encantó su imagen”, añade, “ese look anti glam con el cabello trasquilado, luciendo como un chico delgado. Era todo lo contrario a las imágenes con las que era bombardeada cuando era niña, de lo que se suponía que tenía que aspirar como mujer”.
La voz de Garbage cuenta que la vio como una artista de folk, “en la forma en que Bob Dylan es”.
Luego sigue: “Me encantó que era una poeta involucrada en el arte visual. Para ella no se trataba solo de la música. Era todo. Y ella sabía cuán poderosa era su imagen —que era realmente sexy— y cómo manipular eso para su arte”.
Publicada originalmente en 2011, la columna de Shirley Manson compara a Patti Smith con la entonces popular Madonna. “Lo que Madonna hace hoy en día, Patti lo estuvo haciendo desde el principio. Excepto que Madonna estaba en su periodo de ventas. Sentí que el objetivo de Patti era usar su arte para llevar consuelo y gracia —para mí, personalmente. Las líneas abiertas de ‘Revenge’ en Wave, me dan escalofríos hasta hoy en día”:
—I feel upset / let’s do some celebrating —canta Smith ahí.
Ambas coincidieron hace años en un festival en Atenas, donde Shirley iba a la cabeza de Garbage. “Y me firmó el set list: ‘Power to the People, Patti Smith’. Es un cliché. Sin embargo ella entiende que los clichés funcionan”, cuenta Manson.
Luego agrega: “Una vez hablé con un chico que se negaba a votar, por mucho que entendía su punto, creo que las personas son importantes. Una persona puede hacer la diferencia. Cuando Patti canta ‘People have the power’ me conmueve, porque no soy la única persona que anda por ahí sintiendo esas cosas. Solo puedo imaginar que hay millones de personas allá afuera que la están cantando, que se sienten como yo. Y cuando se suman millones de personas vale la pena”.
Siempre en su columna en Rolling Stone, Shirley Manson añade: “Veo los charts de hoy, a las mujeres que están vendiendo discos, consiguiendo espacios, y me aterra cuántas de ellas están controladas por la idea corporativa masculina de lo que las mujeres y las rebeldes deben ser”. Según la artista, “cuando algún cantante de pop adolescente se toma en serio como una figura rebelde, tenemos un problema. Me alegro que Patti aún esté dispuesta a llegar hasta ahí y luchar por lo que cree. Me hace sentir menos sola”.
“Ella es un soldado”, concluye la voz de Garbage. “Nunca será derrotada”.