Fue en medio de una conversación casual con el escritor Michael Crichton, cuando Steven Spielberg le preguntó cuál sería el tema de su próximo libro. Sin dar muchos detalles, el autor respondió que lo único que podía decirle al director de La lista de Schindler (1993) “es que trata sobre dinosaurios y ADN”. Esa sencilla frase bastó para que Spielberg sucumbiera ante una idea que lo llenó de esa curiosidad que invade la mayoría de sus películas.
En 1990 el director fue contratado por Universal Pictures tras comprar los derechos de la obra, avaluados en 1,5 millones de dólares, y el mismo Crichton trabajó en el guión para adaptarlo a la pantalla grande. Posteriormente, David Koepp afinó los últimos detalles del libreto, quitó varias escenas e introdujo cambios en los personajes. Nacía Jurassic Park.
La trama le propuso un gran desafío al director de Tiburón (1975) y E.T., el extraterrestre (1982), tenía que representar un parque de diversiones habitado por dinosaurios genéticamente clonados como parte del proyecto de un filántropo. En la historia los reptiles escapan en medio de la marcha blanca del parque y ponen en peligro la vida de un grupo de expertos visitantes. Bajo este contexto, Spielberg estaba seguro de una cosa: quería retratarlos como animales en vez de monstruos y para esto tuvo que ingeniárselas con el equipo a través de modelos animatrónicos.
El rodaje de la película se realizó entre agosto y noviembre de 1992 entre California y Hawái. Por otro lado, la posproducción finalizó en mayo de 1993 y para junio de ese mismo año ya estaba disponible en cines. Si bien, la producción de la cinta se hizo más bien rápido, hubo un enorme esfuerzo detrás que incluyó el apoyo de Industrial Light & Magic para los efectos especiales. En el apartado sonido, se contrató a la empresa DTS con experiencia en sonido envolvente, y también a los artistas Dennis Muren, Phil Tippett y a Stanley Winston, este último especializado en diseño animatrónico.
En cuanto al reparto de Jurassic Park, se contrató a Sam Neill para interpretar al paleontólogo fanático de los velociraptors, Alan Grant. El personaje de Malcolm, el matemático experto en la Teoría del Caos, estuvo a cargo de Jeff Goldblum, quien se reunió con científicos para acercarse al mundo de la física. Por otro lado, el rol de Ellie fue encarnado por Laura Dern, quien se preparó visitando el Museo de Historia Natural de los Ángeles con el fin de situarse mejor en el contexto de la película. El papel del filántropo millonario Hammond, lo realizó Richard Attenborough, hermano del biólogo y voz de la BBC, David Attenborough.
Respecto al insoportable programador Dennis Nedry, cuyo papel tendrá incidencia directa en el accidente de Jurassic Park, el director seleccionó a Wayne Knight. Para Spielberg fue fácil decidirse por Ariana Richard para el personaje Lex Murphy, luego que en su audición despertara a la esposa del director quien fue corriendo a ver a sus hijos para ver qué estaba pasando.
La vida se abre camino
Jurassic Park significó una de las primeras veces que el protagonista de una película era un personaje creado de manera digital. En la década de los 90 nunca se había intentado algo así, por esa razón eran muchos riesgos en un arte que no había sido perfeccionado del todo. Es más, su éxito o fracaso iba a depender de qué tan bien hechos y creíbles estuvieran los dinosaurios.
“En vez de asustarme con algo completamente nuevo, pensé que sería divertido para la audiencia y para mí traer de vuelta a los dinosaurios de forma creíble”, comentó Spielberg entrevistado por el canal TCM.
Sumado a esto, la trama proponía un escenario que mezclaba elementos de la prehistoria con el mundo contemporáneo, este cruce envolvió al espectador entre laboratorios con microscopios y computadores, un automóvil de navegación automática y dinosaurios del período Cretácico.
Ya lo decíamos, el rodaje se situó en la hermosa isla hawaiana de Kauai, donde la producción recibió una visita inesperada: el huracán Iniki. Ocurrió el 11 de septiembre de 1992 y con su paso la producción sufrió la pérdida de uno de los sets por donde Samuel L. Jackson tenía que arrancar de los dinosaurios. Debido al costo económico se decidió eliminar la toma. En el mismo sitio se grabaron varias escenas, como un cuadro del exterior del parque. Posteriormente el equipo viajó a otras islas como Ni’ihau y Oahu, donde se filmó la famosa secuencia de la estampida de Gallimimus.
Otras escenas se grabaron en los mismos estudios de Universal Pictures, como la toma de los velociraptores en la cocina o la secuencia del ataque del tiranosaurio a los vehículos eléctricos. En otra oportunidad, la producción viajó a Red Rock Canyon en Nevada, para representar un territorio extenso y abandonado. Por otro lado, también se obtuvieron imágenes desde República Dominicana.
Durante el rodaje, Spielberg también debió improvisar, dejar el libreto de lado y escuchar algunas de las propuestas del equipo. Un ejemplo de esto fue cuando Jeff Goldblum, que interpreta a Ian Malcolm, sugirió que su personaje podría tener un acto de heroísmo al distraer al tiranosaurio con una bengala, en vez de simplemente arrancar. A Spielberg le gustó y aceptó.
En otro momento inesperado por la producción, el mismo Goldblum dijo la frase en el centro de visitantes: “Creo que estamos extintos”, esta parte tampoco estaba dentro del guión y se mantuvo. Luego, el director dio un toque maestro a la historia cuando pensó que el tiranosaurio podría atacar a los velociraptores, permitiendo así otro final a los protagonistas.
Efectos y tropiezos
Con las limitaciones técnicas de 1992, uno de los asuntos que mantuvieron preocupado a Steven Spielberg era que los dinosaurios no parecieran de mala calidad, sobre todo cuando se les podía ver junto a personajes humanos y escenarios reales.
Por suerte, la película de ciencia ficción contaba con un buen equipo para hacer frente al reto y un plan. Primero, los ensayos redujeron la cantidad de especies, para esto se contrató a ilustradores y especialistas. Como resultado quedaron seis diseños de dinosaurios, de los quince que idearon en un comienzo. La participación de Stan Winston fue un acierto, sumado al trabajo de otros especialistas, que lograron armar varias secuencias con la técnica de go motion a cargo de Phil Tippet.
Una vez finalizados los modelos, se contactó al paleontólogo Jack Horner que quedó un tanto horrorizado, pues no le gustaron las lenguas y sugirió que se las quiten. “¡Los dinosaurios no pueden hacerse de esa manera!”, reclama en el making-of de la película.
Una vez terminados los diseños, se crearon modelos robóticos que fueron recubiertos de látex, luego ILM hizo lo suyo y montó la escena que terminó por convencer a Spielberg. El movimiento fue posible mediante un sistema hidráulico que se controlaba a través de computadores. A su vez, un grupo de cuatro personas se encargó de desplazar los modelos a escala; como resultado se obtuvo una combinación entre estas dos técnicas.
En medio de la grabación de animatrónica hubo un problema que retrasó todo un día de trabajo: la lluvia. Particularmente en la escena donde el tiranosaurio ataca a los vehículos. Producto del agua, los modelos de dos metros —creados con fibra de vidrio y más de 130 kilos de arcilla— se volvieron más pesados y difíciles de manipular.
Para la escena con los vehículos de navegación automática se usaron siete Ford Explorer, modificados por el equipo de Industrial Light & Magic, permitiendo que una persona conduzca desde el interior del maletero.
La escena del vaso con círculos concéntricos ocasionados por los pasos del enorme tiranosaurio rex, vino desde una idea que tuvo Spielberg cuando escuchaba a Earth, Wind & Fire en su vehículo y se dio cuenta de las vibraciones que provocan los bajos de las canciones. Con esto en mente le pidió a Michael Lanteri, un integrante del equipo, que toque una cuerda de guitarra ubicada debajo del tablero.
Casi a contrarreloj, parte de la postproducción de Jurassic Park se hizo con Spielberg lejos del estudio, ya que se encontraba en Polonia rodando su siguiente película, La lista de Schindler.
El esfuerzo dio sus frutos: Jurassic Park recaudó más de 900 millones de dólares y pasó a la historia como la producción más taquillera hasta el estreno de Titanic un lustro después. Fue galardonada con tres premios Óscar y se le alabó por los efectos especiales, además de la participación del compositor John Williams para la creación de la banda sonora.
Spielberg había creado el blockbuster perfecto, revolucionando el mundo cinematográfico de una década e influenciado a la cultura de masas con un éxito que supo conjugar lo analógico con lo digital.