Durante la jornada del pasado martes, y a horas de abandonar la Casa Blanca, Donald Trump indultó a Lil Wayne (Dwayne Carter Jr), que estaba sentenciado por portar armas y municiones de forma ilícita, durante su viaje en un avión privado hacia Miami. Igualmente, a Kodak Black (Bill Kapri), quien ya cumplió la mitad de su condena, acusado por el mismo delito tras confesar en 2019 que falsificó los papeles que se requieren para acceder a ellas.
Fue a través de una carta dirigida a Joe Biden, donde Trump dio a conocer la lista de personas que serían indultadas y conmutadas. Este acto es una de las atribuciones que tienen los presidentes estadounidenses y solo puede ser aplicada en crímenes federales.
En la declaración emitida por la Casa Blanca se indicó algunas de las razones para otorgarle el beneficio a los raperos: “El Sr. Carter ha demostrado su generosidad a través de su compromiso con una variedad de organizaciones benéficas, incluidas las donaciones a hospitales de investigación y una gran cantidad de bancos de alimentos (...) Kodak Black se involucró profundamente en numerosos esfuerzos filantrópicos”, dice el documento.
A su vez el abogado de ambos artistas, Bradford Cohen, dijo en Rolling Stone: “El presidente Trump y su Administración han sido defensores incansables de la comunidad afroamericana. Estos indultos son un ejemplo perfecto de que esta Administración sigue sus reformas y compromisos”.
En oportunidades anteriores, Lil Wayne demostró su apoyo hacia el gobierno de Trump. En 2020 el rapero compartió un tuit en el que colgó una fotografía con el ex mandatario y celebró su trabajo en “el plan latino” con el mensaje: “Además de lo que ha hecho hasta ahora con la reforma criminal, el plan latino le dará a la comunidad una verdadera propiedad. Escuchó lo que teníamos que decir hoy y aseguró que lo hará y que puede hacerlo”.