El Centro Pompidou, edificio diseñado por Renzo Piano y Richard Rogers en 1977, estará cerrado hasta 2026.
Luego que la pandemia de coronavirus obligara a cerrar salas de cine, teatros, museos y diversos recintos turísticos, en el caso del Centro Pompidou, este extenderá su clausura más allá de la crisis sanitaria mundial.
Calculando que para finales de 2023 la pandemia ya estaría más o menos controlada, el recinto artístico cerrará sus puertas con motivo de una “renovación total” que se extenderá por tres años.
La idea es que la restauración profunda, tanto del exterior como del interior de edificio, esté lista para inaugurar a comienzos de 2027, cuando el Centro Pompidou celebre sus 50 años de existencia.
“Las obras son una garantía para el futuro del Centro Pompidou”, dijo en un comunicado citado por El País, el presidente de la institución, Serge Lasvignes. “Se trata de preservar nuestra primera obra maestra, el edificio, que no ha sido sometido a ninguna renovación profunda desde 1977”.
Según detalló Lasvignes, el principal objetivo de las obras es eliminar totalmente el amianto de la construcción para “responder a las normas de seguridad, técnicas y energéticas en vigor, así como a las normas de accesibilidad para el público con discapacidades”.
También se cambiarán todas las vidrieras, se tratará la corrosión de la estructura principal y toda la cerrajería. Además, se renovarán la pintura, los suelos, ascensores, montacargas y escaleras metálicas del foro, entre otros.
El proceso de restauración del edificio que en 2019 fue visitado por 3,2 millones de personas, tendrá un costo de 200 millones de euros.
La ministra de Cultura francesa, Roselyne Bachelot, dijo al diario Le Figaro, que había dos opciones sobre la mesa: restaurar el Centro manteniéndolo abierto, o un cierre total.
“Elegí la segunda, porque duraba menos y era un poco menos cara”, declaró Bachelot, agregando que realizar las obras por etapas, manteniendo el acceso al público, habría prolongado el proyecto hasta siete años.
En declaraciones a la Agencia France Presse, el director del Centro Pompidou reconoció el “desafío” que supone cerrar el museo en pleno centro de París. Sin embargo, Serge Lasvignes considera que el Pompidou no podía esperar más para renovarse.
“Las obras son indispensables para que siga siendo ese ícono mundial de la modernidad y la arquitectura contemporánea que atrae cada año a millones de visitantes. Me felicito de esta decisión que nos permitirá festejar a lo grande nuestros 50 años y que inscribe plenamente el Centro en el Siglo XXI”, concluyó el presidente de la institución.