“Un caso como ningún otro”, describe una voz en off extraída de un reporte de prensa de la época, el que tiene razón por diferentes motivos.
De partida, sus protagonistas eran dos figuras del cine que brillaban por sí mismas. Ella, una reconocida actriz y él, un renombrado director y guionista. Juntos colaboraron en más de 10 películas. Eran la pareja dorada del Hollywood de los 80.
Sin embargo, a comienzos de los 90, la imagen de aquella dupla prodigio de la pantalla grande, poco a poco se rompió en mil pedazos.
En enero de 1992, tras la separación con Farrow, se supo que Woody Allen tenía una relación con Soon-Yin, la muchacha de 21 años de ascendencia coreana que Mia Farrow adoptó en 1977 con su entonces esposo, André Previn.
Meses después, en agosto de ese año, Mia Farrow acusa a Woody Allen de haber abusado de la hija adoptiva de ambos, Dylan Farrow, de 7 años. Una denuncia que la actriz realizó luego que una amiga le comentara que la niñera avisó comportamiento inapropiado por parte de Allen, y la posterior declaración de Dylan confirmando que el cineasta tocó sus genitales.
Woody Allen siempre negó tales acusaciones. El caso se investigó judicialmente durante 14 meses, y se determinó que no había evidencia creíble de abuso o maltrato. En paralelo, fue rechazada la solicitud de custodia de sus hijos por parte de Allen.
La prensa de ese entonces cubrió todo el caso, así como las declaraciones al respecto tras la sentencia final.
En 1997, Woody Allen se casó con Soon-Yin, y la familia Farrow se mantuvo firme contra Allen, hasta el presente.
Entre los sucesos más recientes, figuran la negativa de las distribuidoras estadounidenses de difundir los filmes de Woody Allen, y la cancelación de un acuerdo editorial para publicar su autobiografía A propos of nothing -la que finalmente cambió de editorial-.
Este domingo 21 de febrero, HBO estrena el documental de cuatro partes Allen v. Farrow, una producción dirigida por los premiados cineastas de investigación Kirby Dick, Amy Ziering y Amy Herdy.
Un relato construido por medio de imágenes íntimas de videos caseros, documentos judiciales, evidencia policial, audios, y entrevistas con Mia Farrow, Dylan Farrow, Ronan Farrow, la amiga de la familia Carly Simon, el fiscal Frank Maco, familiares, investigadores y peritos.
“Allen v. Farrow también examina los efectos del trauma en una familia y presenta voces culturales prominentes que exploran el cuerpo de trabajo de Allen en un contexto más amplio y reflexionan sobre cómo las revelaciones públicas sobre la vida personal de los artistas pueden conducir a reevaluaciones de su trabajo”, dice la sinopsis del documental respecto al dilema “separación de una obra de su autor”.
Mira el tráiler a continuación:
Algunas de las críticas coinciden en que este documental muestra solo una parte de la historia: la versión de Mia Farrow.
“Allen v. Farrow, lejos de contemplar las dos partes, es una suerte de nuevo intento de la familia Farrow de reivindicar su postura, con Mia Farrow a la cabeza. Por eso mejor Farrow v. Farrow. O Farrow, mi verdad. O Farrow, la herencia envenenada, que también hay algo de esto”, dice Vanity Fair en su reseña.
“No es solo que el documental no aporta ninguna prueba inédita en un caso que ya llevó al director ante los tribunales sin condena alguna, sino que los elementos a los que recurre o bien han sido evaluados en diferentes juicios y/o son conocidos por todos e inútiles a la hora de probar la culpabilidad. Y por tanto capciosos”, añaden en la crítica.
Desde el Boston Globe, en tanto, sin negar la voz mayoritaria de los Farrow, aprecian que por primera vez se escucha claramente lo que Dylan Farrow -con 35 años, casada y con hijos- tiene que decir al respecto.
“Nos recuerda claramente las graves tensiones de negación e hipocresía en nuestra cultura con respecto al abuso sexual y el incesto, especialmente en el período anterior al #MeToo. Por razones que se remontan a nuestra cultura patriarcal y adoradora de la fama, la serie deja en claro que muchas personas han estado demasiado felices de aceptar la demonización de Allen de Mia Farrow como una mujer despreciada y celosa de su hija Soon-Yi, con quien Allen se casó, y usar a su hija Dylan para vengarse”, apuntó el crítico de televisión.
Allen v Farrow estrena su primer episodio este domingo 21 de febrero, a través de HBO.