Durante cuatro exitosos años, Tomás Vidiella, Coco Legrand y Jaime Vadell conformaron un tridente implacable en las tablas. Bajo la dirección de Rodrigo Bastidas, desde 2016 reunieron más de 450 mil personas con la obra Viejos de mierda, un récord para el circuito local que incluso propició una versión femenina y la idea incipiente de una posible adaptación cinematográfica.
“Haber trabajado con él fue tremendamente enriquecedor”, dice Legrand al teléfono, tras darse a conocer la muerte de Vidiella esta tarde a los 83 años, producto de complicaciones derivadas del Covid. “Tenía una gracia y una maestría que siempre eran una lección, que me servían para darme cuenta cómo manejaba la gestualidad, con el cariño, con el amor con que hacía cada una de sus presentaciones. Eso era estimulante”.
El humorista cuenta que ayer se había comunicado con la hermana de su colega, Eliana, pero que apenas se enteró que Vidiella se había contagiado se preocupó especialmente, recordando la grave neumonía que sufrió a inicios de 2018 y que por entonces obligó a suspender varias funciones de Viejos de mierda.
“Obviamente un bicho tan letal como este lo iba a dañar de manera profunda. Tuve miedo, porque (esa vez) fue larga la espera para que se pudiera recuperar, sobre un mes. Y a la edad que lo pilla”, señala, agregando que “uno siempre tiene la esperanza de que esto se iba a terminar luego, que íbamos a poder seguir”.
“Ayer Eliana me dijo que había amanecido bastante mejor, más tranquilo… Y ahora esta noticia. Quedé completamente jaque mate al rey. Dios mío”, expresa.
Años antes del fenómeno teatral que protagonizaron, Legrand rememora que iba a ver Vidiella y su trabajo en la compañía Teatro El Túnel. “Fui muy hincha de él, desde que yo estaba en sexto año de Humanidades. Siempre me llamó la atención por el talento, la gracia que tenía”, afirma. “Fue un gran maestro, uno aprende mucho de las pausas, las miradas. Él siempre tuvo ese talento, le brotaba”.
“Era un hombre que estaba hecho para vivir la vida de actor y de comediante. Se fue uno de los grandes”, sostiene sobre el intérprete, a quien llamó en febrero cuando los Premios Caleuche lo distinguieron en reconocimiento a su trayectoria.
Golpeado por la partida de su colega y maestro, Legrand cierra: “Realmente estoy dolido con esta noticia, pensé que íbamos a tener mucho más tiempo para estar juntos”.