Venezuela, la maternidad o la hija de Marx: qué ver en la nueva edición del Festival de Cine de Mujeres

Siguiendo la tónica de los demás certámenes de cine durante la pandemia, y con una selección de películas que reúne diversos nombres de realizadoras alrededor del mundo, el Festival de Cine de Mujeres (FEMCINE) vuelve en su edición número once la próxima semana.

Ahora, con seis días de largometrajes, cortos y actividades en paralelo, entre el 23 y el 28 de marzo a través de la plataforma FestHomeTV. Una nueva instancia donde uno de los puntos centrales será la entrada liberada, con 400 visionados por cada obra disponible.

“La llamada de este año es ‘cine que reúne’, porque a estas alturas estamos todos cansados de este panorama difícil y el cine siempre ha sido ese lugar para reencontrarnos. Me parece que las películas que escogimos este año nos permiten eso, reencontranos, dialogar, acercarnos a experiencias ajenas. Ahora, hay películas sobre migración y violencia, pero también algunas sobre cómo mantenemos relaciones a pesar de la distancia o cómo nos encontramos con nosotros mismos”, comenta la directora del festival, Antonella Estévez.

Con 65 títulos disponibles para el público general que abarcan desde dramas sociales, hasta amores y feminismo, parte de la oferta viene de países como Australia, Bélgica, Canadá, Colombia, España, Cuba y Finlandia. Aquí algunas de las obras que estarán disponibles y sus tramas.

Con un paso por el Festival de Cine de Venecia en 2020, la película de Susanna Nicchlarelli es la obra inaugural del certamen femenino hecho en Chile. Con una historia de época, la cinta sigue a la hija menor de Karl Marx, una de las primeras mujeres en establecer una relación entre el socialismo y el feminismo y batallar en aquella lucha por los derechos de la mujer. En medio de eso, se ve enfrascada en una apasionante historia de amor.

La obra trasandina y documental pone en pantalla a un grupo de personas mayores que hace 18 años se reúnen en un bar de la capital para leer y repasar el libro “En busca del tiempo perdido” de Marcel Proust. Entre bromas y obsesiones, la cinta en blanco y negro muestra cómo estos protagonistas le dan un nuevo significado a la novela.

En 2020, la obra de María Álvarez ganó el premio a Mejor largometraje en el Festival Internacional de Cine de Mar del Plata.

Con el Gran Premio del Jurado de la sección Generation en el Festival de Cine de Berlín, el largometraje de ficción de Caru Alves de Souza es parte de la competencia internacional de la instancia femenina.

La historia sigue a una joven patinadora de 17 años que vive en un barrio trabajador de la ciudad de Sao Paulo en Brasil. Entre un grupo de amigos y su familia, la protagonista vive un vuelco en su vida tras conocer a un grupo de mujeres que también dedican su tiempo a aquella pasión sobre ruedas.

El largometraje narrado de manera no lineal cuenta un drama que mezcla a la mujer, el trabajo y la violencia doméstica. Por un lado, narrando la historia de maternidad de su protagonista, que es interrumpida por un trágico accidente, y por otro, la rehabilitación de esa situación.

El drama holandés de Esther Rots de 2018 también fue parte del Festival de cine de Berlín y Toronto.

Entre la corrupción política y la contaminación, el registro documental sigue la vida de los pobladores de una comunidad emplazada en el Lago Maracaibo y los problemas asociados a aquel estilo de vida. Un trabajo que incluso hizo que por primera vez un producto de ese tipo llegara al festival de Sundance.

La película de 2020 dirigida por Anabel Rodríguez es parte del cierre del festival el sábado 27 de marzo desde las 21:00 horas.

Claro que a las películas en competencia, también se suman otras destacadas por la directora del certamen. “Hay algunas como ‘Morgana’, ‘Linea 137′ o ‘Tener o no tener’ que son parte de un espacio -Cine foro- que también suma una diálogo sobre estas en asociación con la Universidad de Chile y el Centro de Humanidades de la UDP. Así también existe otro foco con mujeres que son directoras de fotografía, un rol extremadamente masculinizado”, detalla.

“Pese a este formato online tiene algunas complicaciones, también posee algunos beneficios como la posibilidad de llegar a todo Chile y también de poder estar vinculados con invitados internacionales que van a estar haciendo talleres, charlas y masterclass. Es una manera de sacarle el lado luminoso a este momento tan oscuro”, concluye Estévez.

La cartelera completa y demás actividades de los seis días de festival se encuentra disponible en el sitio web de FEMCINE.