Aurora del Sur Mestizo, el proyecto con el que la cantante Aurora Alquinta publicará a fines de mayo el primer disco con su nombre, además de ser el nuevo trabajo musical de la hija del fallecido Eduardo “Gato” Alquinta, es el más reciente lanzamiento artístico de la que se podría llamar “la segunda generación Jaiva”, aquella integrada por los hijos e hijas de los cinco fundadores del conjunto viñamarino.
Una numerosa prole que se acerca a los 20 integrantes y donde se encuentran -a raíz de la historia nómade del quinteto -distintas nacionalidades, biografías que se cruzan y no pocas aventuras musicales, algunas emprendidas en solitario desde Chile o Europa, otras en conjunto y otras directa o indirectamente ligadas al espíritu de los autores de Todos juntos.
El ejemplo más emblemático y conocido es sin dudas el de Juanita Parra, hija de Gabriel Parra, nacida en Santiago en 1970 y desde 1991 la baterista oficial de Los Jaivas, a donde llegó como la sucesora natural del músico fallecido en un accidente automovilístico en Lima en 1988. Antes se había desempeñado como parte del equipo técnico del grupo. Y en paralelo, ha colaborado en bandas como Huaika y el trío rockero femenino Besos con Lengua.
En el caso de los descendientes de “Gato” Alquinta, la misma Aurora -quien nació en Argentina en 1975 pero ha pasado casi toda su vida en Francia- ya tenía un proyecto previo, Yemaya la Banda, un colectivo de mujeres dedicado a la salsa y con base en París, que acumula más de dos décadas de historia en los escenarios y que en 2011 editó su hasta ahora único álbum.
En 2003, tras la sorpresiva muerte de su padre, la cantante se hizo cargo temporalmente de las voces en Los Jaivas, participando en una extensa gira de homenaje junto a los sobrevivientes del conjunto, para luego abandonar el grupo -por diversos motivos que expuso a Culto- y retornar a Europa.
En los últimos años, además, ha colaborado musicalmente con su hermano Moisés Alquinta, que también se dedica a la música y vive en Francia (como ella, hijo del segundo matrimonio del “Gato”) y con Fresa Parra, hija del tecladista Eduardo Parra.
Algo del trabajo musical de Moisés Alquinta se puede encontrar en plataformas, donde ha subido diverso material -en ocasiones acompañado por su hermana- bajo el alias de Moicha.
Los hijos mayores de Eduardo Alquinta, Eloy y Ankatu Alquinta, formaron a mediados de los años 90 el grupo Huaika. Un proyecto de rock de raíz folclórica con el que editaron tres discos con resonancia y difusión en el circuito local (el primero de esos álbumes producido por el propio “Gato” Alquinta), en el que también participaron Leo y Jorge Yáñez -hijos del folclorista Jorge Yáñez- y Amaru Parra, hijo de un histórico representante de Los Jaivas.
En 2003, con la muerte del líder y cantante de Los Jaivas, Eloy y Ankatu se sumaron momentáneamente a la histórica agrupación -junto a su hermana Aurora-, poniendo un paréntesis en Huaika. Un año después, en marzo de 2004, Eloy Alquinta murió de un infarto cuando volvía de un concierto en Mendoza junto a los autores de Mira niñita.
Ankatu Alquinta continuó por cerca de una década con Los Jaivas, hasta que en 2013 fue despedido por los restantes miembros de la agrupación, quienes consideraron que los proyectos paralelos de su entonces guitarrista eran incompatibles con los del conjunto. Tras demandar a sus excompañeros por despido injustificado -acción que al año siguiente se resolvió con un acuerdo extrajudicial entre las partes-, el músico se lanzó como solista con Dicen que, un disco de rock y música de raíz latinoamericana con ciertos ecos a la obra de su progenitor.
“He incorporado muchos elementos de mi padre en este desarrollo artístico porque considero importante el tema de la identidad”, comentaba Ankatu Alquinta este medio en 2017. “Gato es el principal referente de la guitarra eléctrica en Chile y si alguna enseñanza me dejó es esa esencia creativa y evolutiva en la música. Para mí, honrar su memoria es hacer música nueva”, agregó el solista, quien hoy reside en La Serena, donde continúa haciendo música.
A los nombres mencionados se suma el de Michael Peronard, hijo de Mónica Monsalve -la segunda esposa de Gato Alquinta- y residente en Francia, quien ha colaborado con su hermana Aurora y se encargó del trabajo gráfico y la carátula de su próximo disco.
Algunos de los cuatro hijos del tecladista Eduardo Parra (Blanca, Fresa, Rosita y Víctor), quien hoy está alejado del grupo y vive en Colombia, también se han acercado a la música y emprendido sus propios proyectos artísticos.
Fresa Parra, por ejemplo, hija de Verónica Fernández y nacida en Zárate (Argentina) en 1973, en los días en que Los Jaivas se instalaron al otro lado de la cordillera. Además de colaborar con Moisés y Aurora Alquinta, y en un trío musical junto a Ankatu Alquinta y Erasmo Parra (hijo de Claudio), Fresa inició un proyecto musical llamado Uñas Negras durante sus días de estudiante de Diseño en Valparaíso, tocando la batería.
“La música de a poco se fue transformando en una compañera que siempre tuve, siempre me cobijó en todo momento y no podía vivir sin ella y me encanta y siempre me gustaron todos los instrumentos”, comentaba en un artículo reciente para el sitio Revista de Los Jaivas.
“Pero la batería me maravillaba, Gabriel (Parra) maravillaba… era algo que nos dejaba sin palabras sin aliento y todos queríamos tocar batería y varios tocamos batería, de hecho, la Juanita, Amaru y yo”, agrega en la nota Fresa Parra, donde anuncia un disco junto al compositor Toto Álvarez.
El menor de los descendientes de Eduardo Parra, Víctor Parra Villegas -hijo del músico y su actual esposa, la colombiana Sandra Villegas-, también protagoniza una carrera musical en ascenso. Nacido en Francia en 1999, se crió en el barrio de Chatenay-Malabry donde cursó estudios de piano en el Conservatorio de Música y Danza de la zona, además de “instrucción sobre informática aplicada a los programas de escritura y registros sonoros”, según detalla un artículo de Revista de Los Jaivas.
Desde hace algunos años desarrolla una carrera solista bajo el nombre artístico de Ryvale. Un proyecto vinculado a la música urbana que transita entre el hip hop y el reggaetón, y del cual pueden escucharse algunos sencillos en plataformas digitales, como Insta, La botella y Cuando me mira.
“Hace ya varios años que trabaja en la búsqueda y creación de temas y canciones que hurgan especialmente el rap de París para entusiasmarse también con el reggaeton de Centroamérica”, consigna el citado artículo.
De los hijos del pianista Claudio Parra, Lautaro, Ivonne y Erasmo, este último ha realizado una interesante carrera como músico y productor tanto en Chile como en el extranjero.
Radicado actualmente en Amsterdam, Erasmo Parra ha colaborado con artistas de hip hop, electrónica y rock, como los chilenos Matanza, Makiza y Valentina Fel. Hace algunos años, además, formó un trío musical junto a Ankatu Alquinta y Fresa Parra.
En España creó su propio sello discográfico, Antartek Records, y en Inglaterra trabajo durante algunos años en Lizard King Records, casa discográfica independiente con base en Londres que editó los primeros trabajos de The Go, Santigold y el grupo The Killers. De hecho, según cercanos a Parra, este participó en procesos de producción y composición de parte del material de la primera época del grupo de Brandon Flowers, junto al productor Martin Heath, aunque no figura en los créditos oficiales.
Durante sus días en Lizard King Records, además de adentrarse en el trabajo del estudio de grabación, conoció parte de la industria audiovisual del primer mundo, lo que impulsó su aún inédito proyecto High Bass: una película sobre la prehistoria de Los Jaivas, anunciada en 2015 y financiada a través de crowdfunding.
Actualmente se encuentra trabajando en un largometraje llamado Charango y, con su productora Katdark Studios, en la posproducción del cortometraje U-47700.
Finalmente, son cuatro los hijos que se conocen del bajista Mario Mutis: Camilo, América, Marina y Mario. Los tres primeros, fruto de su relación con Carmen Parra, hermana de Claudio, Gabriel y Eduardo.
Marina Mutis Parra es actriz y licenciada en Arte con estudios en dirección escénica. Desde hace varios años dirige la compañía de música y percusión corporal Kumbá. Además, según se lee en el sitio del grupo, fue la única mujer seleccionada por Mayumana en la primera audición realizada por la compañía en Chile, y se ha perfeccionado en batería y percusión corporal con el maestro Carlos Figueroa (Chile), Fernando Barba (Brasil), Keith Terry (Francia), entre otros.
Mientras América Mutis figura como agente inmobiliaria en las redes sociales, Mario, el hijo menor del bajista, estaría actualmente dedicado a la fotografía.