“The Big Screen is Back” (la gran pantalla está de regreso) es la consigna que ha instalado la industria estadounidense para que los espectadores vuelvan a acudir en masa a los cines, tras más de un año de cierre y apertura parcial. Una estrategia para convencer tanto a desconfiados como a quienes aún no se han vacunado, que también busca enganchar con nuevos adelantos de estrenos y las primeras pistas de proyectos que se mantenían bajo siete llaves.
Es el caso de The year of the everlasting storm (El año de la eterna tormenta), una película colectiva que reúne segmentos filmados por reputados cineastas durante la pandemia, tanto en ficción como en documental. Según se reveló en un evento en Los Angeles este miércoles, en esa cinta participa la directora chilena Dominga Sotomayor, uno de los nombres de la filmografía local más apreciados en el extranjero, que rodó durante el año pasado una historia ficcionada que es parte de la obra.
El proyecto tendría como fin operar como “una carta de amor a los cines y sus narradores”, de acuerdo a lo que recoge el portal Screen Daily. Un propósito que también se fijaron otros títulos cocinados desde la llegada del Covid, como la colección de cortos Homemade, que reunió a Pablo Larraín y Sebastián Lelio con voces internacionales como el italiano Paolo Sorrentino y la actriz Kristen Stewart.
En su caso, la realizadora de De jueves a domingo (2012) y Tarde para morir joven (2018) colabora con un grupo de siete directores que mezclan veteranía y juventud. El iraní Jafar Panahi y el tailandés Apichatpong Weerasethakul son dos viejos conocidos del cine de autor, ganadores de las máximas distinciones de los festivales Venecia y Cannes, respectivamente.
El singapurense Anthony Chen es contemporáneo a Sotomayor. Si la cineasta chilena hizo historia en 2018 al ser la primera mujer premiada con el galardón a Mejor dirección en el Festival de Locarno, Chen causó sensación en 2013 con su ópera prima, Ilo Ilo, un íntimo drama sobre una familia en medio de la crisis asiática de los 90, por el que se alzó con la Cámara de Oro del Festival de Cannes.
La tropa de siete realizadores la completan tres estadounidenses: la documentalista Laura Poitras, ganadora del Oscar por su retrato sobre Edward Snowden (Citizenfour); el ecléctico David Lowery, que dirige filmes para Disney y también historias personales como A ghost story; y por último Malik Vitthal, que debutó en 2014 con el drama Imperial dreams, sobre un pandillero reformado.
El proyecto es avalado por Neon, compañía que ganó visibilidad en Estados Unidos gracias a que distribuyó Parasite en 2019 y fue clave en su triunfo en los Oscar. La misma empresa estrenará este año en Norteamérica Spencer, la película de Pablo Larraín sobre Lady Di.
The year of the everlasting storm, en tanto, se transformará en el primer lanzamiento de Sotomayor desde el elogiado corto documental Correspondencias (2020), un intercambio visual de reflexiones y apuntes que hizo con la española Carlos Simón (Verano 1993), exhibido en los festivales de San Sebastián y Valdivia.