Luego que las autoridades de salud y el presidente Piñera dieran a conocer hoy los cambios en el plan Paso a Paso, que entre otros puntos modifica -desde el próximo jueves 15- los aforos permitidos para eventos en vivo en cada fase, favoreciendo a aquellos que cuenten con 100% de sus asistentes vacunados contra el Covid-19, la Sociedad Chilena de Autores e Intérpretes Musicales (SCD), que representa a más de 14 mil músicos locales, considera que los cambios no son suficientes para garantizar el retorno de la música en vivo dentro del país. Al menos en lo inmediato y tomando en cuenta que varias comunas del país siguen en fase 2 (Transición).

A través de un comunicado, el nuevo presidente de la entidad, Rodrigo Osorio, expresó que “los aforos establecidos para la Fase de Transición aún nos siguen pareciendo sumamente restrictivos y no permiten un desarrollo que haga viable nuestra actividad”.

Para el también vocalista del grupo Sinergia, en cuanto a espectáculos en fase 2, “el esquema completo de vacunación permitirá apenas 50 personas en espacios cerrados y 100 en abiertos, lo que hace muy difícil solventar los costos de un evento y establecer una planificación que considere la posibilidad de cambiar de fase 2 a 3, y viceversa”.

Rodrigo Osorio, presidente de la SCD. Foto: Felipe Prado

En ese sentido, Osorio subrayó los avances que en las últimas semanas se han visto en el sector en Europa y Estados Unidos, donde ya se está apostando por el retorno de los grandes aforos entre personas que cuenten con carnet de vacunación.

“Pensamos que este anuncio era la oportunidad para plegarse a un enfoque similar, lo que no sólo hubiera tenido lógica en un país que se aproxima al 80% de la población objetiva vacunada, sino que además hubiera constituido un inmejorable incentivo para que las personas continúen vacunándose”, indicó.

De todas formas, el músico valoró que exista una apertura hacia el retorno de las actividades culturales, y compartió su expectativa de que el avance en el proceso de vacunación permita continuar incrementando los aforos, única opción de poner fin a la aguda crisis que enfrentan el mundo de la música y el sector cultural en general, tras casi 16 meses sin poder desarrollar su trabajo en condiciones normales y sin recibir apoyos directos del Estado.