Fue una de las noticias del año en 1918. El robo de un millón de dólares de la época cometido a una sucursal del Banco del Estado en Chuquicamata. Fue en ese hecho en el que se basó el escritor nacional Guillermo Valenzuela para escribir Banco de arena, su nueve novela que ya está disponible vía Editorial Planeta.
“Este caso en especial quedó algo marginado del espectro político de los derechos humanos, ya que los funcionarios del Banco del Estado no eran militantes de ningún partido”, comenta el escritor. “Esa diferencia es aterradora. De alguna manera, es la crónica roja la que se hace cargo y pese a la brutalidad impresionante del crimen, ejecutado por agentes del Estado, quedaron relegados injustamente a un hecho de sangre con robo que llevó la justicia ordinaria”, menciona.
“Aparecen, por sobre la convicción ideológica, política, social o racial, el espectro de las debilidades y necesidades humanas. Hay en la novela un trabajo de perspectiva que la hace mirar el horror, si se quiere, como algo cotidiano”, sugiere. “Es un trámite diario movilizarse para matar, torturar, secuestrar y dinamitar porque es un trabajo que alguien tenía que hacer durante el tiempo que duró la CNI”, explica Valenzuela y reconoce que éste es un foco distintivo. “Es un acercamiento hacia el terrorismo de Estado que no viene de la condena previa, sino del entendimiento desde lo más pedestre”, afirma.
Banco de arena ya se encuentra disponible en las librerías nacionales.