Como suele ocurrir cada vez que se acerca diciembre, Horacio Salinas (Lautaro, 1951), compositor, multi instrumentista y director musical de Inti-Illimani Histórico, empieza a darle vueltas a distintas ideas para los tradicionales conciertos de fin de año que junto a su grupo han presentado hace más de una década en diversos teatros del país.
Para esta ocasión, eso sí, el músico no tuvo que rebuscarse demasiado para encontrar un concepto para el recital que parece obligatorio y necesario: un homenaje en dos fechas a su gran amigo y compañero Patricio Manns, el recientemente fallecido cantautor y escritor con quien Salinas compuso a medias algunos de los mayores himnos de sus respectivas carreras, clásicos de la discografía de Inti-Illimani como de la música popular chilena del último medio siglo.
“Después de la muerte de Patricio recordarlo viene como algo muy espontáneo para nuestro grupo, hacer una semblanza musical del trabajo que hicimos y de su importancia en el panorama de la música chilena”, explica el músico sobre el espectáculo, bautizado simplemente como Inti-Illimani Histórico canta a Manns. Dos conciertos que el conjunto realizará en el Centro de Extensión del Instituto Nacional (Arturo Prat 33, Santiago), el próximo 29 y 30 de diciembre, con un programa centrado en el repertorio que el autor de Arriba en la cordillera aportó para la agrupación en diversas épocas.
“El asunto es sencillamente recordarlo a través de las increíbles canciones que compuso, algunas de las cuales las hicimos juntos”, resume Salinas, quien junto a Manns compuso cerca de 40 piezas a lo largo de diversas décadas. Algo de cada época incluirá cada función, que recorrerá antiguos himnos del cantautor de los años 60, como La guitarrera que toca y El andariego; algunos temas que hicieron a cuatro manos desde su exilio de mediados de los 70, como Vuelvo, Cantiga de la memoria rota, Medianoche y Palimpsesto, además de temas de amor de Manns que la agrupación versionó en el disco en vivo Inti-Illimani Histórico canta a Manns (2014), con el mismo título de los próximos conciertos.
“También están las canciones que hicimos para los niños (Canciones del mito americano, 2001), de donde salió Danza verde, y toda esa serie de boleros y valses peruanos que nunca hemos cantado, porque corresponde a la época en que se inicia nuestro divorcio y ese disco (Amar de nuevo) quedó medio prisionero, en un espacio medio extraño”, detalla Salinas.
Las entradas para ambos conciertos saldrán a la venta este lunes, a través de Puntoticket.
Para el músico, los dos shows en memoria de su aliado musical, así como los dos recitales que diversos artistas harán en noviembre en el Teatro Caupolicán como homenaje al ídolo de la Nueva Canción Chilena -donde también estará Inti Histórico-,
servirán también para paliar lo que considera una deuda por parte del Estado chileno hacia Manns, quien murió en septiembre pasado en medio de aglomeraciones y masivas muestras de cariño de sus admiradores y colegas, aunque sin grandes reconocimientos por parte de la autoridad y lamentando hasta el final no haber recibido nunca el Premio Nacional de música ni de literatura.
“Creo que por un buen tiempo vamos a seguir recordando a Patricio, en contraposición frontal con este mutismo absolutamente inexplicable que han tenido las instituciones del estado, partiendo por el Ministerio de las culturas, de no haber sacado una mínima nota respecto a la muerte de Patricio”, asegura Salinas.
Para el director musical, la situación “contrasta tan violentamente con, por ejemplo, lo que acaban de hacer los argentinos, celebrando un mes entero los 70 años de Charly García. O cuando uno piensa que en Francia murió Charles Aznavour, que era armenio pero parisino, y que esa noche la ciudad iluminó la Torre Eiffel con su rostro.
Aquí te das cuenta de la nula importancia que la gente del estado y la ministra le dan a los músicos importantes, cantantes que han hecho una contribución gigantesca a la historia de la canción. Me parece de una tristeza enorme. Estamos a años luz de entender que la cultura es algo trascendental en la vida”.
“La Nueva Canción Chilena empieza a cerrar sus puertas”
Junto con esto, tal como expresó en una columna publicada hace un mes en este mismo medio, para Salinas la muerte de Manns comienza a marcar la desaparición de buena parte de los referentes que impulsaron la Nueva Canción Chilena desde la década del 60.
“Me impacta un poco, porque empiezan a desaparecer físicamente, empezamos a vivir el fin de todo un contingente de artistas que partieron en los 60. Ya no está Ángel Parra, ni el gitano Rodríguez, ni Rolando Alarcón, un montón de gente, una pandilla creativa, muy talentosa. Entonces es muy importante que las nuevas generaciones, independientemente de los estilos, tengan en la retina esto. Como decía Igor Stravinsky, hay que componer mirando por el espejo retrovisor, mirando ese pasado sin el cual no se puede entender el futuro”, señala.
“La Nueva Canción Chilena empieza a cerrar sus puertas, porque además ha cambiado el contexto, hoy es otra la música”, sigue.
“A mí siempre me ha parecido algo ingenuo cuando alguna gente, en buena onda, le exigen a uno seguir siendo el protagonista que fue hace 40 o 50 años. ‘¿Pero qué dice el Inti illimani ahora?, ¿dónde están las canciones revolucionarias de esta época?’. Nosotros no tenemos mucho que decir que no sea el eco de alguna bonita canción o melodía que hicimos. Ya lo nuestro fue lo que hicimos, algo que aún resuena en el mundo, pero ahora es el tiempo de toda esta generación que ha incorporado felizmente algo de ese cierto rigor de la Nueva Canción”, cierra.