El actor Alec Baldwin no olvida uno de los eventos más traumáticos de su vida y por cierto el más difícil de su trayectoria: pidió que a partir de ahora se exija la presencia de un policía en los rodajes de cine y televisión que usen armas, verdaderas o falsas. El 21 de octubre, en un accidente que aún está en plena investigación y bajo alta controversia, el intérprete mató de un disparo a la directora de fotografía Halyna Hutchins.
“Cada set de cine/TV que utilice armas, falsas o de otro tipo, debería tener un agente de policía pagado por la producción para que específicamente revise la seguridad de las armas”, afirmó Baldwin en un mensaje que primero publicó en su cuenta de Twitter, que ahora es privada, y luego en su perfil público de Instagram.
Las autoridades del estado de Nuevo México (Estados Unidos) continúan investigando qué falló para que el mes pasado, durante el ensayo de una escena en el western Rust, Baldwin disparara un revolver que estaba cargado con una bala de verdad, que mató a Hutchins e hirió al director del filme, Joel Souza. El arma debería haber tenido balas de fogueo, pero no fue así.
El actor y productor ha hecho varias declaraciones públicas recientes sobre el tiroteo: el sábado tuiteó un artículo de The Wrap sobre las declaraciones despectivas que hizo el ex presidente Trump sobre él y su papel en el incidente.
La semana pasada, Baldwin compartió capturas de pantalla de una publicación hecha por una persona que trabajó en el set de Rust que contradecía las afirmaciones de maltrato laboral por varios miembros del equipo y defendía las acciones de los productores.
Pocas horas antes del grave incidente, parte del staff se manifestó en redes alegando pésimas condiciones laborales de la instancia, además de subrayar después que habían advertido que no existía un manejo seguro de las armas usadas.