Hace algunos días se dio a conocer el fallecimiento de Howard Grimes, veterano baterista y uno de los pilares de la escena soul de Memphis, Tennessee, en Estados Unidos. Para los entendidos en el soul, el blues y la música de raíz estadounidense, su muerte no pasó despercibida.
Según constató el medio NPR, la muerte de Grimes fue a causa de una insuficiencia renal a sus 80 años, y confirmada por su compañero de banda Scott Bomar, con quien compartiría en The Bo-Keys, una agrupación de soul y jazz conformada como una suerte de homenaje a la tradición musical de Memphis.
Durante su historia, Grimes destacó como baterista de la agrupación Hi Rhythm Section, quienes fueron los músicos de sesión del mítico sello discográfico de soul Hi Records, durante los años 70.
Consciente de su lugar tanto en el legado musical de Memphis como de las raíces sobre las que se construyó su trabajo, Grimes fue el encargado de mantener viva la tradición musical de su ciudad natal mucho después de su época de mayor auge.
“Crecí con los maestros. Siempre vuelvo a mis raíces. Todos los artistas de blues y los artistas de jazz y la gente del evangelio, de ahí es de donde viene todo. Nunca los dejo, y es allí hacia donde voy” señalaría Grimes en una entrevista para el medio Bluefat.
Los primeros pasos de un Bulldog
Grimes desde muy pequeño tuvo sus primeros acercamientos con la música por medio de su madre, quien era una asidua fanática del pianista Duke Ellington y el saxofonista Cannonball Adderley. Sin embargo, su primera inspiración para convertirse en baterista, surgió en el luego de presenciar una película biográfica del enérgico Gene Krupa, uno de los más importantes bateristas de jazz del formato “Big Band” durante la primera mitad del siglo XX. Tras esto, Grimes viviría el que sería un definitivo evento revelador: tras asistir a un concierto del trompetista Louis Armstrong quedaría fascinado al ver que Cozy Cole, un hombre afroamericano, tocaba la batería, lo cual terminó de afirmar su decisión de convertirse en músico.
Inspirado por quienes consideraría sus maestros, siendo aún extremadamente joven, Grimes comenzó a practicar con la batería y rápidamente conseguiría presentarse en vivo en diferentes clubes de Memphis. De hecho, su primer concierto en público, lo daría con solamente 12 años, ocasión en la acompañó como baterista a un ya consolidado Rufus Thomas
De manera precoz Grimes comenzó a ser reconocido por sus actuaciones en la escena local, lo que, tras unos años, le valdría la oportunidad de participar en su primera sesión de grabación en 1959. En aquella experiencia, acompañó nada menos que al dueto Carla & Rufus Thomas en la canción Cause i love you.
El éxito de la canción Cause i love you, ayudaría a lanzar el sello Satellite Records, el cual más tarde pasaría a llamarse Stax, el que con el correr de los años se transformaría en uno de los mayores pilares de la escena musical de Memphis. Durante su etapa en Stax, Grimes sería discípulo de Albert J. Jackson Jr., baterista y miembro fundador de la banda de R&B y soul, Booker T. & the M.G.’s, quienes eran por entonces una de las bandas más reconocidas dentro de la escena local.
Entrados ya los años 70, Grimes comenzaría a trabajar con el director y productor discográfico Willie Mitchell, en su sello Hi Records, ocupando el puesto de baterista principal en la agrupación Hi Rhythm Section, luego de la muerte de su padrino musical en 1975.
Sería precisamente durante esta época en que Grimes jugaría un rol fundamental en la creación de algunas de las grabaciones de música soul más memorables y exitosas de aquella década, contribuyendo como músico para Al Green en su sencillo Let’s Stay Together, y para Ann Peebles en I Can’t Stand the Rain.
Sus aportes serían cruciales para el desarrollo del incipiente sonido soul de Memphis, el que viviría su época de oro por aquellos años. De esta forma, junto a Hi Rhythm Section, Grimes aparecería además en innumerables éxitos y álbumes de músicos como Syl Johnson y Otis Clay, algunos los cuales alcanzarían estatus de oro y platino.
Por aquellos años, y debido a su particular estilo de tocar el bombo, Grimes recibiría el apodo de “El Bulldog”, por parte de Willie Mitchell.
“Willie Mitchell me dijo: Sabes, Howard, cuando tocas, puedo oírte venir de lejos”, señalaría Grimes al periódico Memphis Flyer, en 2021.
Últimos años
Sin embargo, el declive de la música soul a fines de los años 70 determinó que el sello Hi Records fuera vendido, y con ello, se disolvió su banda de sesión. Este hecho, provocó que Grimes perdiera su fuente laboral, situación que lo llevó a perder su hogar a comienzos de 1980.
“Me estaba muriendo y tuve una experiencia más allá de mi cuerpo. Me levanté y estaba en una cueva oscura, desde donde vi una luz a través de un túnel. Y escuché una voz que decía ‘Camina hacia la luz’... Luego, la voz me dijo: Me has obedecido bien. Te enviaré de vuelta”, señalaría Grimes en una entrevista realizada al medio Commercial Appeal, de Memphis, en 2021.
Luego del cierre de Hi Records, Grimes se presentaría de manera esporádica en presentaciones con su ex compañero en Hi Rhythm Section, Tennie Hodes, apareciendo en el álbum Perfect Gentlemen de Hodges Brtohers.
Sin embargo, en 1998 Grimes viviría un nuevo despegue, aunque no con la misma intensidad alcanzada durante los años 70, cuando sería llamado a formar parte del proyecto musical The Bo-Keys.
Por aquel entonces, se le solicitó a Scott Bomar, un reconocido compositor de cine y productor musical de Memphis, que formara una banda de acompañamiento para el ex artista y compositor del sello Stax, Sir Mack Rice. La idea era crear una versión actualizada del clásico sonido local de los años 70, por lo que Bomar decidió reclutar a los mismos músicos que fueron parte de esta escena.
Luego de la conformación, The Bo-Keys se presentó en vivo en diferentes festivales, entre los que destacan The Ponderosa Stomp, una presentación en el Barbican Performing Arts Center en Londres y el concierto interpretado en el MidSummer Night Swing Series, realizado en el Lincoln Center.
Luego, en 2003, The Bo-Keys grabarían en Royal Studio, el cual fuera propiedad de Willie Mithcell, lo que sería su álbum debut, conocido como The Royal Sessions, disco que recibiría un amplio recibimiento por parte de la crítica. Años más tarde, aunque con un éxito menor, lanzarían Got to get back! (2011) y Heartaches by the number (2016).
Estos dos álbumes, serían las últimas grabaciones de Grimes, quien hasta sus últimos días, supo ver en sí su rol y legado en la música soul.
“Mi ritmo es la columna vertebral del sonido de Memphis. El ritmo de esta ciudad corre por mi corazón... Estoy conectado con la música de esta ciudad. Los viejos maestros con los que toqué, con los que llegué, me han dicho que los escuche, que cuente lo que pasó y que los recuerde. Me pidieron que dijera la verdad por ellos después de que ya no estén. Y ahora casi todos se han ido”, escribiría en su autobiografía.