Si hay un grupo chileno con motivos para celebrar por estos días, es Illapu. En octubre del año pasado, el histórico conjunto antofagastino fundado en 1971 comenzó la conmemoración de su ya medio siglo de carrera, siempre impregnada del acontecer nacional y de la contingencia durante los últimos 50 años.
Una serie de conciertos -incluyendo un paso por el Movistar Arena-, una reciente antología y un nuevo disco en camino han sido parte de los festejos de una trayectoria vital para el cancionero chileno, sólo interrumpida -según ellos mismos han declarado- por el golpe militar de 1973 y por la pandemia. Y ahora, también, por las dificultades que enfrenta la escena local para volver a tocar en vivo y su enfrentamiento con la autoridad para exigir condiciones más favorables. Algo que Illapu vivió en carne propia días atrás, cuando en medio de su show en Lanco la Seremi de Salud decidió abrir un sumario sanitario a la producción.
“Tiene que ver con la historia de nuestro país. Nosotros, nuestra canción, ha estado muy ligada al devenir de la historia del pueblo chileno, y por lo mismo en nuestra discografía ha ido quedando plasmada un poco la historia que nos ha tocado vivir en estos 50 años”, dice a Culto el vocalista y director musical, Roberto Márquez.
Iniciados como parte del proyecto político-cultural de la Unidad Popular, pasando por la dictadura, el exilio, la vuelta a la democracia, la transición, el estallido social y la pandemia, Illapu se ha mantenido como uno de los conjuntos de más extensa trayectoria en la actualidad. Pocos grupos del país han llegado a cumplir 50 años juntos y en plena vigencia artística.
Fundado en 1971 en la ciudad de Antofagasta por los hermanos Jaime, Andrés, José Miguel y Roberto Márquez, junto a su primo en segundo grado Osvaldo Torres, sólo Roberto se ha mantenido como el único miembro inamovible durante todos estos años. En este sentido, es él la voz más autorizada para analizar el legado y los detalles de la historia del grupo, que pronto darán forma a un libro en el que se encuentra trabajando junto a un escritor nacional.
“El libro está prácticamente escrito, faltan algunas precisiones y cosas que todavía queremos terminar de redondear. Debió haber salido como estaba planeado en octubre, que es la fecha del aniversario de los 50 años, pero nos hemos dado como plazo todo este año, desde octubre de 2021 a octubre de 2022, para que todo esto que está en gestación vaya saliendo de a poco”, explica.
En paralelo al libro y a una gira nacional e internacional que -según se espera- debiese culminar a fines de este año, Illapu trabaja en un libro de fotografías que retratará toda la historia del conjunto -cuya fecha de publicación se mantiene en reserva- y, el pasado 4 de febrero, la agrupación lanzó una antología musical titulada 50 años, que se configura como un repaso de lo más importante de su repertorio.
“Es una antología en la cual trabajamos de manera de hacerlo en décadas. Está primero la década 71-81, donde hay doce canciones, después 81-91, doce canciones, después 91-2001, doce canciones, 2001-2011, diez canciones y 2011-2021 diez canciones más que incluyen incluso La vida volverá, que es último trabajo que hicimos nosotros en pandemia”, comenta Roberto Márquez.
A su vez, Illapu se encuentra ad-portas de sacar un nuevo sencillo de su nuevo LP, y según detalla el propio Márquez “prontamente también un tercero”, los que, junto a la ya estrenada La vida volverá, armarán la trilogía previa al lanzamiento del próximo LP, que espera vea la luz en noviembre de este año.
Dulce y agraz
Si bien el ánimo es mayoritariamente festivo, Roberto Márquez no puede despegarse de la problemática que ha surgido en torno al gremio musical, debido a la extensa pausa que vivieron por las restricciones sanitarias de los últimos años, junto a las dificultades que hoy enfrentan para reactivar la escena en vivo. Y aunque hay espacios que poco a poco se han vuelto a recuperar con aforos reducidos, la reciente ola de cancelaciones para algunos shows nacionales de hace algunas semanas provocaron nuevamente el malestar del sector.
Márquez junto a Illapu fueron protagonistas de uno de los capítulos más recientes de este conflicto: durante su interpretación en un show realizado en Lanco, Región De los Ríos, Márquez detuvo el concierto para informar que la Seremi regional abrió un sumario sanitario contra la municipalidad local, por supuestamente no haber respetado las medidas sanitarias contra el coronavirus.
“Este es un estadio en el que caben 10 mil personas y habremos cuánto ¿cincuenta, veinte? En el Monumental si va a estar lleno, el Metro lo siguen rellenando. Los malls, claro que les vayan a comprar a sus socios”, señaló Márquez durante la presentación.
Durante el lunes de esta semana, el ministro de salud Enrique Paris, respaldó públicamente la decisión que adoptó la autoridad local, señalando que: “No estamos en contra del arte, de la cultura, de la música ni los conciertos”.
A su vez, el ministro se refirió a los antecedentes que, hasta entonces, pudo recabar la autoridad.
“En este concierto, según la información que yo tengo, por parte de la Seremi, es que se pactó una forma de trabajar, pero se llevó a cabo otra. La gente de la Seremi, al llamado de la población del mismo lugar, fueron a hacer el control y encontraron que había gente que no contaba con el Pase de Movilidad, y eso se está investigando” señaló.
¿Finalmente qué reflexión sacan ustedes al respecto?
Mira, primero que el ministro Paris sigue mintiendo como han mentido siempre. Porque, cuando habla de que hay gente que no tenía pase de movilidad, sí estábamos todos controlados los que estaban en el estadio, estaban sus mismas autoridades ahí, para hacerlo. Entonces, yo creo que de parte de este gobierno no ha habido ni un apoyo a la cultura, ni uno. Y por eso está la queja del mundo del arte en general. Porque fue el mundo que primero se detuvo, los eventos de arte fueron de los primeros que dejaron de funcionar, y estamos siendo los últimos en volver, cuando funcionan los malls llenos, cuando están planteando hoy día que los colegios van a partir 100% presencial. O sea, el absurdo absoluto, pero es el absurdo absoluto con que ha actuado este gobierno (…).
Además, el líder de Illapu apunta directamente a la gestión del presidente Sebastián Piñera, destacando que, tras el cambio de mando durante el mes de marzo, espera que se renueven las relaciones entre el gremio musical y las autoridades entrantes.
“(…) Son gente que tiene otra sensibilidad, otra mirada del mundo, otra forma de relacionarse con la naturaleza, con el arte. O sea, no tiene nada que ver con lo que vivimos, y a lo mejor habrán algunos que ya estuvieron en gobiernos anteriores, porque sí van a haber. Pero yo siento que el grueso son jóvenes que tienen una mirada distinta y eso tiene que notarse, se va a notar en todo, incluso en la forma de llevar adelante lo que quedará de la pandemia, en la relación con el medio ambiente, en la relación en temas de género, que todo eso ya se está viendo”, señala Márquez.
Sin embargo, pese a la expectativa que posee el músico frente al próximo gobierno, el músico comenta que esto no significa que no existirán eventuales críticas, reafirmando además el rol que espera que cumpla la música de Illapu durante el futuro.
“Vamos a estar muy pendientes en ayudar en todo lo que haya que ayudar, y también en ser críticos frente a las cosas que haya que criticar. Porque esto, en lo que estamos ayudando, es un sueño que ha logrado el pueblo chileno luchando en la calle, que se ha logrado con mucha represión. Además hay que decirlo: las Fuerzas Armadas, en general, incluidos Carabineros, son cosas que hay que democratizar y que tienen que aprender a vivir en democracia. Y ojalá que también seamos capaces con esta Nueva Constitución de que eso suceda, de ser capaces realmente de ser un país distinto, a eso estamos apuntado. Nuestra canción seguirá estando ahí, un pequeño faro de luz con el cual pretendemos también iluminar un poco los momentos oscuros que vive nuestro pueblo”, puntualiza Márquez.
Su vigencia
Roberto Márquez cumplió 70 años durante octubre 2021, y aunque reconoce que quizás con 50 años de trayectoria “podríamos estar pensando ya en nuestra jubilación”, según comenta, es precisamente la mirada desde el arte hacia la historia del país lo que los hace mantener su vigencia.
De la misma forma, durante los últimos años, Illapu ha colaborado con músicos más contemporáneos, participando en conciertos con Nano Stern y la Banda Conmoción. Además, reconocidas son sus presentaciones en conjunto con la agrupación Santaferia, de quienes rescata esa misma juventud que le provoca esperanzas en el futuro.
“Yo que he estado trabajando con músicos jóvenes, es una cuestión que es increíble cómo te rejuvenece y cómo te hace mirar la vida de una manera distinta. Si bien yo ya estoy ya por los 70, me siento que estoy tan cerca de la mirada que tiene gente mucho más joven, gente que está todavía haciendo nuevos intentos en la música y el arte en general. Te hacen partícipe y hacen que te rejuvenezcas, absolutamente”, comenta.
Estas colaboraciones han ayudado, en parte, a abrir la puerta que mantiene vivo su legado, provocando que nuevas generaciones conecten con su música.
“Así que bueno, celebramos estos 50 años en plena vigencia con un público que nos sigue que es muy amplio, además llegan incluso niños, jóvenes, que se sienten muy atraídos todavía en nuestra propuesta” cierra.