Fue sin duda la polémica de la noche y todo comenzó como una mala broma. Durante la celebración de los premios Oscar de su edición número 94, el comediante y actor Chris Rock se dispuso en el escenario para presentar el premio a Mejor documental, el que finalmente recayó en la cinta Summer of soul (2021), dirigida por Ahmir “Questlove” Thompson, y cuya historia gira entorno al Festival Cultural de Harlem de 1969.
Haciendo gala de su particular estilo, Rock comenzó a realizar una serie de bromas que apuntaron a algunas de las actrices que en ese momento se encontraban durante la ceremonia llevada a cabo en el Teatro Dolby, en Los Ángeles. En un comienzo, los chistes del comediante se dirigieron a los actores Javier Bardem y Penélope Cruz, señalando que el actor español había desistido de llevarse el Oscar como Mejor actor debido a que su esposa “no había ganado”.
Tras esto, se dio inicio al momento extra cinematográfico por el que la ceremonia de premiación del presente año será recordada como una de las más polémicas del último tiempo. Así, el comediante apuntó sus chistes sobre Jada Pinkett Smith, la esposa del actor, de quien dio a entender que se parecía al agente G. I. Jane, personaje de la serie G.I. Joe quien hace algunos años atrás fue interpretado por la actriz Demi Moore.
Pinkett Smith, quien sufre de alopecia hace algunos años, fue comparada con ese personaje ya que este lleva su cabello rapado.
En ese momento, se pudo ver visiblemente molesta a Pinkett, frente a lo que Will Smith se levantó de su asiento, dirigiéndose a paso firme hacia el escenario y una vez en él golpeo en el rostro a Chris Rock.
Todos los asistentes quedaron atónitos, de hecho, en un comienzo se pensó que la situación estaba actuada. Sin embargo, más convincente resultó el hecho de que luego de volver a su asiento, Will Smith comenzara a gritarle al comediante: “Mantén el nombre de mi esposa lejos de tu maldita boca”.
Tras esto, vino un silencio incómodo y el artista continuó sobre el escenario, en donde para distender los ánimos comenzó a bromear diciendo: “Esa fue una de las mejores noches en la historia de la televisión”.
El momento vino a coronar una serie de polémicas mediáticas en las que Smith -quien pese al bochornoso espectáculo se erigió como Mejor actor por su papel de Richard Williams en la película Rey Richard: Una familia ganadora (2021)- se ha visto involucrado durante el último tiempo.
Previo a lo sucedido durante la noche del domingo, ya habían existido algunos roces entre Smith y Rock. Así, en 2016, mientras el comediante participaba como anfitrión de los Premios de la Academia, realizó bromas sobre algunas de las declaraciones que Pinkett Smith había realizado semanas antes de la celebración, ocasión en la que señaló que durante ese año nuevamente los nominados para Mejor actor eran “exclusivamente blancos”. Incluso dijo que no iría a la cita, llamando a una suerte de boicot.
“Jada dijo que no vendrá. Yo estaba como, ‘¿No está ella en un programa de televisión?’ ¿Jada va a boicotear los Oscar? Jada boicoteando los Oscar es como yo boicoteando las bragas de Rihanna. ¡No fui invitado!” bromeó Rock por ese entonces.
Así mismo, el comediante también se burló de Smith, luego de que, aquel año, su nombre sonara como un posible candidato por su papel en la cinta La verdad oculta (2015).
“Will no fue nominado por ‘Conmoción cerebral’. Lo entiendo. Tú te enojas. No es justo que Will fuera tan bueno y no fuera nominado. Tienes razón. Tampoco es justo que a Will le pagaran 20 millones de dólares por Wild Wild West”.
Por entonces, cuando consultaron a Will Smith mientras se encontraba en rodaje en New York sobre las bromas emitidas por el comediante, el actor se limitó a ofrecer una sonrisa y realizar el signo de “paz” con su mano.
Sin embargo, nadie se imaginaría en cómo seguiría aquella historia, cuyo último capítulo determinó que el símbolo de paz se transformase en una poco pacífica mano abierta.
De esta forma, lo ocurrido durante la noche de ayer coronó una serie de polémicas que han llevado al actor a permanecer entre los titulares de los medios de comunicación durante el último tiempo. Así, Smith ha revelado polémicas vivencias de su vida privada, como también ha indagado sobre sus primeros años, llevando a la luz diferentes situaciones que se han traducido en lo que para muchos ha sido una suerte de estrategia para mantenerse en la palestra.
Confesión de matar a su padre
Una de las polémicas más bulladas, surgida luego de la publicación de su autobiografía titulada Will (2021) estrenada el 9 de noviembre en Estados Unidos, se vincula a su niñez. De esta forma, el actor indagó sobre lo que fueron sus inicios junto a su padre William Carroll Smith, quien falleció en 2016 producto de un cáncer, y su madre, Caroline Bright quienes lo criaron junto a sus tres hermanos en los barrios de Filadelfia en Estados Unidos.
En el libro, el actor expuso lo que en sus palabras fue uno de los incidentes “más traumáticos” vividos durante su infancia, y que se vincula directamente a su padre, lo que llevó a plantearse el incluso llevar a asesinar a su progenitor.
“Mi padre era violento, pero también estuvo en cada obra de teatro y recital que daba. Era alcohólico, pero estaba sobrio en los estrenos de cada una de mis películas. Escuchó cada disco. Visitó todos los estudios -de grabación-. El mismo perfeccionismo intenso que aterrorizó a su familia fue por el que consiguió poner comida sobre la mesa todas las noches de mi vida”, señala el actor en un extracto del diario publicado inicialmente en la revista People.
El actor ahondó más allá en uno de estos eventos, el que lo marcó para siempre.
“Cuando tenía nueve años, vi a mi padre golpear a mi madre en la cabeza con tanta fuerza que se derrumbó. La vi escupir sangre. Ese momento en esa habitación, probablemente más que cualquier otro momento de mi vida, ha definido quién soy”.
Si bien los padres de Will Smith se separaron siendo él aun muy joven, no fue hasta los años 2000 en que ambos oficializaron su divorcio. Así, y pese a que el actor mantuvo durante toda su vida una relación cercana con su progenitor, éste comentó entre las páginas de su autobiografía que jamás pudo deshacerse de el sentimiento de rabia contra él por la violencia que ejercía contra su madre.
Según relata el propio actor, esto lo llevó incluso a pensar en atentar contra la vida de su padre mientras que se encontraba a sus cuidados tras ser diagnosticado de cáncer.
“Una noche, mientras le llevaba desde su dormitorio hasta el baño con cuidado, una oscuridad surgió dentro de mí. El camino entre esas dos estancias pasa por la parte superior de las escaleras. Cuando era niño, siempre me dije a mí mismo que algún día vengaría a mi madre. Que cuando fuera lo suficientemente mayor, cuando fuera lo suficientemente fuerte, cuando ya no fuera un cobarde, le mataría”.
Pensamientos suicidas
Otra de sus grandes confesiones las realizó por medio del estreno de su documental biográfico Best shape of my life (2021), en el que Will Smith, además de bajar de peso, se enfrentó a varios de sus demonios internos, comentando sobre las tendencias suicidas que sufrió siendo adolescente.
Sería precisamente durante la época en la que su familia sufría de la violencia por parte de su padre, en la que Caroline Bright decidiría abandonar su hogar para huir de los maltratos físicos de su esposo.
“Se fue a trabajar a la mañana siguiente y no volvió a casa. No fue muy lejos, solo a unas pocas manzanas de la casa de la abuela Gigi, pero el mensaje era claro: había terminado”, comenta el actor en el documental.
La situación fue un duro golpe para Smith, quien pensó en quitarse la vida ingiriendo diversas píldoras debido a la culpa y la soledad producida por su contexto familiar.
Sin embargo, el propio actor señala que jamás atentó contra su vida por diferentes razones, siendo la principal de ellas su abuela, y que generalmente, cuando ha tenido otros episodios similares se ha refugiado en ella.
“Escuchaba a Gigi decir que suicidarse era un pecado”.
El sexo como un arma de doble filo y una relación abierta
Por otro lado, quizás algunas de las polémicas casi tan comentadas como la cachetada que le brindó a Chris Rock, tenga que ver con algunas de las confesiones que ha realizado Will Smith en torno a su vida sexual y su matrimonio.
De esta forma, en su anteriormente citada autobiografía el actor comenta que sus problemas con el sexo comenzaron luego de que, tras una de sus primeras giras como rapero, se enteró de que su primera pareja le había sido infiel, refugiándose en lo que para el, por entonces, significó una cura: el sexo.
“Necesitaba un alivio, pero no hay píldora para el desamor y he recurrido a remedios homeopáticos y a relaciones sexuales desenfrenadas”, señala en alguno de los pasajes del libro. “No había tenido sexo con ninguna otra mujer que fuera Melanie Parker, pero durante los siguientes meses me convertí en una hiena”.
Sin embargo, este desenfreno sexual, no terminó en algo placentero para el actor, realizando una declaración que, por entonces, escandalizó a gran parte de la audiencia mediática.
“Tuve sexo con tantas mujeres y fue tan desagradable para de mi ser, que desarrollé una reacción psicosomática a tener un orgasmo. Podía literalmente tener arcadas y a veces incluso vomitaba. Esperaba por Dios que alguien consiguiera hacer desaparecer ese dolor, pero ahí estaba yo, con arcadas y miserable. Y la mirada en los ojos de la mujer con que estuviera profundizaba aún más mi agonía”.
Luego de superar esta etapa en su vida, Will Smith se casó con Sheree Zampino, de quien se separó en 1995. Aquel mismo día, un 14 de febrero, comenzó una relación con la actriz Jada Pinkett Smith, con quien se casaría dos años después y tendría tres hijos: Jaden, Willow y Trey Smith.
Así, según ha comentado el propio actor en su autobiografía, los comienzos de su relación con su actual esposa estuvieron marcados nuevamente por el sexo.
“Bebimos todos los días, tuvimos sexo varias veces al día durante cuatro meses seguidos”, señala Will Smith, quien frente a esta rutina comenzó a cuestionarse su relación.
“Empecé a preguntarme si aquello era una competición. En cualquier caso, en lo que a mí me concernía, sólo había dos posibilidades: iba a satisfacer sexualmente a esta mujer o iba a morir en el intento. Esos primeros días fueron espectaculares”.
Desde entonces, han pasado casi 27 años, y durante los últimos meses ambos se han mantenido de manera constante en el ojo mediático. De esta forma, uno de los episodios más comentados protagonizados por ambos, fueron algunas de las declaraciones que realizó Smith durante una entrevista con el medio GQ en 2021.
Luego de que en 2020 Pinkett admitiera públicamente que había sido infiel a Smith con uno de los amigos de sus hijos, el rapero August Alsina, durante una etapa en que su matrimonio se encontraba en “crisis”, el actor se refirió al tipo de relación que mantenía junto a su esposa.
“Aunque al principio fue una relación monógama, ahora ya no lo es”, señaló.
El actor puntualizó sobre esto agregando: “Los espectadores creyeron que Jada era la única que tenía otras relaciones sexuales. No era, de hecho, el caso”.
Desde entonces, mucho se ha especulado sobre la relación de ambos, y al parecer la polémica los ha seguido de manera constante, aunque durante la pasada noche la historia involucró de una manera diferente la figura de un tercero.
“El amor te causa hacer cosas locas; soy un defensor del amor, me estoy esforzando por amar a la gente y no tengo por qué sonreír y aguantar ninguna broma”, señaló Smith luego de ser galardonado.