Es un vicio, una pasión, para algunos, como el periodista argentino Jorge Lanata, coleccionar obras de arte es una forma de vida. Pero a veces las cosas no resultan tan bien. Resulta que el platense fue víctima de una millonaria estafa al comprar tres cuadros que resultaron falsos.
Conocedor del arte de su país, Lanata se hizo con 3 obras que supuestamente eran del artista argentino Juan Melé, uno de los puntales allende Los Andes y cuyo trabajo se desarrolló sobre todo en la década de 1940, enfocándose en el llamado “arte concreto”, es decir, una tendencia dentro del arte abstacto, lejos de modelos y paisajes.
Así lo comentó Paula Varela en el programa de El Trece, Socios del espectáculo. “Lanata se acercó a una galería a través de una señora que se llama Diana García Calvo para comprar las obras. Fue a comprar tres cuadros. Lo que le dijo esta señora, la galerista, fue ‘esta obra es un óleo en madera, no tiene título pero ya el año pasado vendimos una muy bien’. Según le dijo esta mujer, el autor ya estaba fallecido y son obras de alrededor de 1945. Creo que compró por 45 mil dólares dos cuadros y uno por 50 mil”.
Hasta ahí, todo bien. Se llevó las obras a la casa y después las quiso vender. Pero después, vino una vorágine en que las cosas se pusieron feas. “De repente, dijo, ‘quiero vender’. Las buscó, las vio alguien y le dijo ‘perdón, acá te cagaron, esto no está bien. Esta obra es trucha, no es ningún óleo, es tempera de los nenes de jardín de infantes, esto está mal’”, dijo Varela.
Tras el fiasco, Lanata volvió a la galería de arte donde adquirió las obras para pedir explicaciones, pero le dijeron que “no estarían encontrando” al dueño anterior de las piezas. Además, le indicaron que le entregaron certificados de autenticidad al momento de venderle las piezas. Para salir del paso, le dieron 20 mil dólares y la obra de otro autor.
Pero la pesadilla no terminó ahí. “Se fue contento a la casa, pero cuando fue a ver qué tal era esta obra nueva que le dieron, le dijeron ‘te volvieron a estafar’”, sostuvo Varela.
