Dos momentos separados por cuatro años. 6 de marzo de 2018. Cuando cae la tarde, el equipo de Una mujer fantástica es recibido en La Moneda por la Presidenta Michelle Bachelet, en un acto en celebración por la obtención del Oscar a Mejor película de habla no inglesa.
Daniela Vega, en un punto de prensa, toma la palabra. “En mi carnet hay un nombre que no es mi nombre. Y es porque el país donde yo nací no me entrega esa posibilidad. Y el tiempo pasa y el reloj corre y la gente se va, esperando eso”, señala.
3 de junio de 2022. A través de Instagram, la actriz celebra su cumpleaños publicando un pequeño poema que comienza así: “33 años/ Y logré conquistar mi nombre/ Entendí que cuando niña/ Me refugié en las arrugas de mis padres/ Y hoy me reflejo en ellas”.
La intérprete nacional hoy revela que prefirió dejar un mensaje encriptado, oculto en la poesía, “la tinta que escribe mis letras”, apunta.
Hoy cuenta por primera vez que recientemente obtuvo su nueva cédula de identidad, la que inscribe su nombre, Daniela Vega, dejando atrás el documento con su nombre de nacimiento. Tras Una mujer fantástica, su carrera ha seguido despegando, y en su país se han producido los cambios en la legislación que hoy permiten que las personas trans sean reconocidas legalmente como tales.
“Me tiene muy feliz, me tiene muy contenta”, dice a Culto. “Cuando era niña, cuando hice mi tránsito hace 20 años, pensé que no lo iba a conseguir nunca y finalmente lo logré, así que por eso cuando estuve de cumpleaños publiqué ese mini poema”, explica.
Su primer viaje fuera del país con nuevo pasaporte fue a España. Allí fue invitada por la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España -la institución que entrega los Goya, de la que forma parte- a la primera edición de una instancia que busca potenciar la diversidad e inclusión en la industria audiovisual.
Bautizado como Campus de Verano, y realizado en Valencia en colaboración con Netflix, el evento la convocó bajo el rol de madrina, por lo que durante estos días ha compartido con realizadores y dictado diferentes charlas, como la de este martes, donde detalló sus experiencias personales y profesionales ante integrantes del medio.
También se refirió al Mes del Orgullo, la conmemoración que en Madrid concluye este fin de semana y que en distintos puntos del mundo volvió en masa este 2022 tras los estragos causados por la pandemia.
“Cada año se suman nuevos colores a esta acuarela y me parece siempre muy interesante, muy positivo, sobre todo porque si te pones a pensar, hubo personas que, luego de tres años, tal vez no habían asistido nunca a una marcha, porque eran muy jóvenes. Hay un sentimiento de reencuentro por parte de los viejos, que estamos hace tiempo, y de debut de los más jóvenes que no habían podido asistir y disfrutar de un acontecimiento que no solamente es un desfile por las calles, es un acontecimiento que conmemora fechas importantes en nuestra comunidad”.
Vega se explaya sobre otra invitación que aceptó: este domingo será una de las figuras que protagonizará el cierre del Orgullo Madrid 2022 en la Plaza de España, en el centro de la capital hispana. Su participación la tendrá interpretando Gracias a la vida, de Violeta Parra, y recitando uno de los 30 poemas que componen su poemario que se lanzará próximamente al mercado. También cantante lírica, es primera vez que reversionará a la cantautora nacional en un evento público.
“Es una canción que a mí me gusta mucho, es un himno universal. A mí me parece que es muy metafórico, porque es una de las últimas composiciones de Violeta Parra y al mismo tiempo es de sus canciones más universales. Considero que es un archivo histórico vivo. Su voz está viva, sigue estando viva y seguirá estándolo”, indica sobre quien considera que “representa la belleza y la crudeza de la vida”.
¿Pero cómo volver propio un tema reinterpretado en múltiples épocas por distintos artistas?
“Mi voz es en este caso un instrumento conector, simplemente. La canción es en sí misma lo que es, por lo que me subo al escenario con el cariño del público, me subo al escenario con el apoyo de la comunidad de Madrid y de la comunidad internacional, que me invita a participar. Con la confianza de ese cariño”, plantea.
Su siguiente destino será Vancouver, Canadá, donde continuará las grabaciones de la serie The power (Amazon Prime Video), su debut en la ciencia ficción, en la que trabaja con la directora estadounidense Reed Morano (The handmaid’s tale). Una producción que describe como “atingente” y en la que interpreta a una monja.
Cuatro años después del acto que protagonizó en La Moneda, aún no se atreve a calibrar el impacto de Una mujer fantástica y la ficción en el mundo real. En esa oportunidad planteó que el filme “no pretende ser el faro, sino que pretende preguntarse dónde está lo que estamos buscando”.
Hoy afirma: “Si lo que hicimos y lo que pasó sirvió, la historia lo dirá”.