El escritor turco Orhan Pamuk acaba de manifestar su apoyo al autor Salman Rushdie, quien sufrió un atentado el pasado viernes 12 de julio, en Nueva York. En una breve columna en el diario El País, de España, el autor de Las noches de la peste señaló entender la situación que atraviesa el británico.
“Durante los últimos quince años, he estado protegido en mi vida pública por guardaespaldas asignados por el Gobierno turco. Por muy amables que sean los guardaespaldas, o por mucho que se esfuercen en no dejarse ver, la experiencia no resulta agradable”, comentó el Premio Nobel de Literatura 2006.
“Sé por mi propia situación que, después de los primeros años de mayor peligro, el escritor protegido quiere creer que ‘lo peor ya ha pasado’; tal vez ya no necesite guardaespaldas y pueda volver a su vida anterior, hermosa y ‘normal’. La mayoría de las veces esta no es una decisión realista”.
Además, de manera indirecta, Pamuk criticó a la organización que invitó a Rushdie por no tener los resguardos suficientes: “Las universidades, las fundaciones y las ciudades que invitan a un escritor amenazado deberían proteger automáticamente su seguridad, independientemente de lo que el escritor pueda pensar o afirmar sobre su condición”.
Por supuesto, el autor de Las noches de la peste (2021) condenó con todo el atentado y al ejecutante. “Normalmente, quienes aprietan el gatillo o empuñan el cuchillo suelen haber leído muy pocos libros en su vida. De haber leído más libros, o de haber estado en condiciones de escribir uno ellos mismos”.
Y cerró con una oscura señal: “Algunos amigos que saben que estoy escribiendo este breve artículo me han advertido, con razón, que tenga cuidado, aun sabiendo que estoy protegido por guardaespaldas”.