Stephen King -que este 21 de septiembre cumple 75 años- publicó una novela en 1977, y se llevó al cine solo 3 años después, en un ejercicio que cada vez más se haría una costumbre.
Sin embargo, aquel filme de 1980, dirigido por Stanley Kubrick, y que se convirtió en un clásico del cine, a King estuvo muy lejos de gustarle.
Hablamos claro, de The shining, o El resplandor. En una entrevista con la revista Rolling Stone, de 2014, dijo: “El libro es caliente y la película es fría. El libro acaba en fuego y la película en hielo. En el libro, hay un verdadero arco cuando ves a este tipo, Jack Torrance, intentando ser bueno pero decantándose poco a poco hacia la locura”.
Y cada vez que es requerido al respecto, lejos de retractarse o moderar su punto de vista, solo profundiza en su punto: “Creo que El resplandor es una película preciosa, pero es como un Cadillac grande y bonito que no tiene motor en su interior”, dijo al portal estadounidense Deadline, en 2016.
Y sobre la misma agregó: “Cuando vi la película, Jack estaba loco desde la primera escena. Era en un pase en el que estaba Nicholson, y yo pensaba ‘Ya conozco a este tipo, lo he visto en las cinco películas de motoristas en las que Nicholson ha interpretado el mismo papel”.
Más aún, con el The Paris Review, en 2006, se refirió duramente al papel de Wendy, que encarna la actriz Shelley Duvall: “Es una máquina de gritos. No da la sensación de que forme parte de la dinámica familiar en ningún momento”.
Más aún, en la citada entrevista con Deadline, comentó que tuvo una relación poco fluida con el cineasta neoyorkino: “Hablé mucho con Stanley por teléfono antes de comenzar [la producción] y notaba que estaba intentando encontrar su propia manera de acercarse al libro. ‘¿No crees que estas historias de fantasmas son optimistas? Significa que, si hay fantasmas, hay vida después de la muerte’, me dijo. Yo le pregunté: ‘Señor Kubrick, ¿y qué hay del infierno?’. Y él me respondió: ‘No creo en el infierno”.
“Hizo un trabajo tremendo, pero creo que era muy introvertido. Cuando hablabas con él, nunca estaba realmente ahí”, le dijo King a Rolling Stone.