De entrada, Bi Ribeiro -el bajista de Os Paralamas do Sucesso- lanza vía telefónica desde Brasil: “Estamos muy ansiosos de presentarnos en Chile”. Y continúa con genuino ánimo: “Hace 40 años estamos juntos y esta gira es para celebrar eso”. Ribeiro (Brasilia, 1961) no oculta su alegría, ni su orgullo, porque su banda está próxima a cumplir las cuatro décadas, un hito que se concretará el próximo año dado que su disco debut, Cinema Mudo, data de 1983.

Son precisamente esas cuatro décadas, y ese ánimo festivo, lo que el grupo brasileño mostrará este sábado en el Gran Arena Monticello, a las 21:00, con entradas a la venta por sistema www.topticket.cl/. Como ocurrió con la gran mayoría de las bandas, la pandemia paralizó los planes de Os Paralamas, que pretendía iniciar esta gira de conmemoración en 2020. “Llegó el coronavirus y nos quedamos con esas ganas, todo suspendido. Estuvimos dos años parados y apenas pudimos empezamos esta gira en abril pasado”, cuenta Ribeiro, en conversación con Culto.

Si no hubiese sido por la pandemia, Os Paralamas no habría apretado el botón de pausa, algo muy ajeno a su espíritu. De hecho, el trío brasileño -que completan Herbert Vianna en voz y guitarra y Joao Barone en batería- ostenta un récord poco comentado: son el único grupo sudamericano con 40 años de trayectoria con la misma formación original y prácticamente sin pausa. Tal ha sido su determinación que ni siquiera la tragedia los detuvo: en 2001 un avión piloteado por Vianna tuvo un accidente que le costó la vida a su esposa y dejó al guitarrista parapléjico y en coma durante 44 días.

Joao Barone, Herbert Vianna y Bi Ribeiro. Foto: Sitio oficial Os Paralamas do Sucesso

“En Sudamérica no hay otra banda que lleve tanto tiempo con la misma formación, con la banda intacta. Tenemos una cosa muy fuerte entre nosotros: rara vez peleamos y nunca en serio, somos amigos, somos una familia y de verdad es un placer tocar juntos. Entonces no queremos parar, sería como parar la vida”, sostiene Ribeiro.

Grandes éxitos

El último show de Paralamas en Santiago tuvo lugar en octubre de 2018. Aquella vez presentaron parte de su último álbum, Sinais do Sim (2017), en el Teatro Nescafé de las Artes, concierto que incluyó nada menos que 29 temas. Esta vez, el regreso de Paralamas tiene previsto más de 30 canciones, que forman parte de sus 27 álbumes.

“El recital que llevamos a Santiago está basado en nuestros grandes éxitos y es el mismo con el que estamos recorriendo Brasil”, dice Ribeiro, que adelanta que “tenemos además una pantalla nueva que estamos utilizando desde hace poco tiempo”. La tecnología será usada para proyectar fotografías y videos del largo trayecto de Os Paralamas, en todas sus etapas y facetas, desde la influencia de The Police al comienzo de su carrera, el reggae y el dub, el refinamiento pop y el diálogo con la música latina.

Os Paralamas do Sucesso en Rock In Rio, en 1985.

Así, probablemente estarán presentes temas como Meu Erro, Dos margaritas, Coche viejo, Lanterna dos afogados, Uma brasileira y Trac Trac. Pero también sus temas más políticos que ayudan a explicar al Brasil de hoy pese a los años. En esa fase sonarán Alagados, O Beco, Perplexo y O Calibre.

Rock latino en un pueblo lleno de tristeza

Fueron precisamente esas líricas de crítica social las que hermanaron a Os Paralamas con otros gigantes sudamericanos: Los Prisioneros. “Para nosotros el primer contacto con el rock latino fue en un festival en Córdoba (Chateau Rock) en 1986. Y nos encantó. No sabíamos que había eso fuera de Brasil, la misma movida de rock joven y con tanto talento y gente buena. Entonces quisimos ser parte de eso también”, cuenta Ribeiro.

Después del festival cordobés, que tuvo lugar en febrero del 86, Os Paralamas participó en el Montevideo Rock, en noviembre de ese mismo año en la capital uruguaya. Fue ahí donde coincidieron con Los Prisioneros. En el backstage intercambiaron experiencias y Ribeiro aún recuerda con afecto a la banda nacional: “Yo tenía sus discos antes de verlos por primera vez en vivo”. Pese a que la lluvia impidió la realización del show de Os Paralamas, el recuerdo de Ribeiro es grato, precisamente debido a la camaradería con las otras bandas.

Festival Montevideo Rock, en 1986.

“Tuvimos la suerte de conocer gente y hacer amistad con bandas, principalmente de Argentina, pero también de Chile, con Los Prisioneros. Eso fue muy positivo”, rememora Ribeiro. “Teníamos un disco de crítica social y política, estábamos saliendo de la dictadura, y encontramos un paralelo con Los Prisioneros en Chile, así como bandas en otros países. Los temas sociales y políticos estaban en nuestras letras, que siempre fueron biográficas y auténticas”, sostiene.

Las actuales turbulencias políticas en el continente, y en especial en Brasil, no son ajenas para Os Paralamas: el próximo 30 de octubre los brasileños volverán a las urnas para la segunda vuelta de las elecciones presidenciales entre Jair Bolsonaro y Luiz Inácio Lula da Silva. “La derecha ha crecido muchísimo desde que Bolsonaro está en la Presidencia. Su partido creció mucho y aquí estamos divididos 50 y 50 para cada lado. Pero que Lula va a volver”, adelanta.

Os Paralamas durante su última presentación en Santiago, en el Teatro Nescafé de las Artes, en octubre de 2018.

En el futuro inmediato, el grupo brasileño continuará de gira y espera grabar un álbum con nuevas canciones durante 2023. El final del camino ni siquiera está a la vista. “Creo que tuvimos mucha suerte de encontrarnos en la vida, porque hace 40 años que estamos juntos. Aún tenemos deseos en común. No vamos a parar. Hay Paralamas para rato, quizás para 40 años más”, concluye Ribeiro, entre risas.