Es una de las películas de 2022 que ha generado reacciones más opuestas. Personal y grandilocuente, Bardo, falsa crónica de unas cuantas verdades se inspira en las experiencias de Alejandro González Iñárritu como director que hace años vive y hace cine fuera de su natal México.
El filme gira en torno a Silvero Gama (Daniel Giménez Cacho), un reconocido periodista y documentalista con domicilio en Los Angeles, Estados Unidos, que regresa a su país para recibir un premio. Ese viaje aparentemente sencillo es la excusa para que inicie un afiebrado periodo en que se cuestionará su propia existencia.
Primera cinta que el director de El renacido (2015) filma en México desde Amores perros (2000), la película está disponible en la cartelera chilena desde el pasado 17 de noviembre.
Los complejos que la exhiben son Centro Arte Alameda, El Biógrafo, Cine Arte Normandie, Cineplanet Costanera Center, Cineplanet La Dehesa y Sala Nemesio. En tanto, en la Región de Valparaíso, la proyectan Sala Insomnia y Cine Arte Viña del Mar.
De ese modo, el largometraje de González Iñárritu sigue el modelo que se aplicó recientemente con El prodigio (The wonder), de Sebastián Lelio, que se estrenó en cines dos semanas antes de su llegada a Netflix.
En el caso de Bardo…, se lanzó en la pantalla grande local con un mes de anticipación, porque recién el 16 de diciembre estará disponible en la plataforma de streaming para todo el mundo.
