No le salió gratis. Tras los comentarios que realizó sobre el mundo musulmán a fines de noviembre del 2022 durante una charla con el filósofo Michel Onfray, la Gran Mezquita de París demandó al escritor francés Michel Houellebecq. El rector de la entidad religiosa, Chems-Eddine Hafiz, aseguró que las declaraciones del autor de Serotonina constituyen un “llamado a la exclusión” y una “incitación al odio contra los musulmanes”. Además, calificó las palabras del autor como “inaceptables” y de “una brutalidad que genera estupor”.

Para fortuna de Houellebecq, el entuerto ha alcanzado una solución extrajudicial. Esto gracias a la intervención de Haïm Korsia, rabino mayor de Francia, quien en una columna en el diario Le Figaro esta semana se ofreció a mediar entre ambos.

La reunión entre Houellebecq, Hafiz y Korsia se realizó este jueves y consiguieron acercar posturas. De acuerdo a Le Figaro, el hombre de Las partículas elementales reconoció que los párrafos de la polémica son “ambiguos” y se comprometió a publicar una nueva edición de la entrevista donde matizará esos comentarios.

Por su parte, el líder religioso musulmán decidió dejar en suspenso su demanda a la espera de que efectivamente Houellebecq publique ese nuevo texto.

Michel Houellebecq fumando un cigarrillo. Imagen de El Mundo.

Las declaraciones de Houellebecq que más escozor causaron, fueron dichos como estos: “La gente se está armando. Están consiguiendo armas, tomando lecciones en los campos de tiro. Y no son exaltados. Cuando territorios enteros estén bajo control islámico, creo que se producirán actos de resistencia. Habrá ataques y tiroteos en mezquitas, en cafés frecuentados por musulmanes, en definitiva, Bataclan al revés”. Esto, en referencia a los atentados de atacantes suicidas islamistas en 2015 en el teatro Bataclan de París, en los que murieron 130 personas y otras 415 resultaron heridas.

Además, señaló: “El deseo de la población nativa francesa, como dicen, no es que los musulmanes se asimilen, sino que dejen de robarlos y atacarlos. O si no, otra solución: que se vayan”.