“Por Dios, soy japonesa y no lo sabía”: Gwen Stefani aborda la polémica por apropiación cultural
La cantante de No Doubt, abordó por primera vez las críticas a sus referencias a la cultura japonesa en una entrevista con Allure.
En una controvertida conversación con la revista, Allure, Gwen Stefani, de padre, italiano-estadounidense y madre, irlandesa-estadounidense, declaró ser japonesa y además, inspirada e identificada con la comunidad hispana latina de Anaheim, donde ella creció. La intérprete de Don’t Speak, ha sido acusada de aprociación cultural por proyectos que incluyen lineas de fragancias y su album Love. Angel. Music. Baby, insipirados en la cultura Harajuku.
Stefani se justificó con los viajes que tuvo que hacer durante 18 años por el trabajo de su padre en la empresa japonesa, Yamaha. Luego, contó que tuvo la oportunidad de volver a viajar a Harajuku y soltó la frase controversial que la tiene en los titulares de hoy: “Dije. Por Dios, soy japonesa y no lo sabía”.
La vocalista de No Doubt, lanzó su primer álbum como solista el año 2004, Love. Angel. Music. Baby. o L.A.M.B, inspirado en la cultura japonesa, tanto en sus visuales como en los looks de la artista. Años despúes, la presencia de la cultura estuvo en el lanzamiento de su perfume Harajuku Lovers.
Gwen, ha vendido como solista y parte de No Doubt, más de 50 millones de unidades alrededor del mundo. En relación a su marca, al 2018 Stefani había vendio más de $US1 billón en ventas de retails, que incluyen su Harajuku Lovers y Harajuku Mini.
“Si la gente me va a criticar por ser fan de algo precioso y compartirlo, creo que eso no está bien. Fue un precioso tiempo de creatividad... un ping-pong entre la cultura Harajuku y la cultura americana”, dijo Stefani.
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