Pocos esperaban que, de todos los artistas nominados en la categoría de Mejor Canción del Año, ganara Bonnie Raitt. La cantautora de 73 años derrotó sorpresivamente a gigantes del pop como Beyoncé, Lizzo, Adele y Harry Styles en la categoría.
Just like that, balada sobre una madre que escucha el corazón de su hijo a través de la persona a la cual se lo trasplantaron, logró ganarle a cartas seguras para la categoría como Beyoncé, Adele o Harry Styles. En su discurso de agradecimiento, la cantautora agradeció a la Academia por “rodearme con tanto apoyo y apreciar el arte de escribir canciones como yo lo hago”.
No era primera vez que la cantautora recibía este premio. En 1990 su álbum Nick of time fue nominado a distintas categorías del certamen, y ganó en cuatro, incluyendo Album del año.
Antes de recibir el premio, la artista participó del sentido apartado “In Memoriam”, en el cual la Academia homenajea a los músicos y personas importantes de la música que fallecieron en el ultimo año. Junto a Sheryl Crow y Mick Fleetwood, la cantante homenajeó a Christine McVie (fallecida en noviembre del año pasado) con una emotiva versión de Songbird.
Su carrera comenzó en el año 1971 con el lanzamiento de un disco homónimo. Con álbumes orientados al blues, el country y el sonido Americana, su trayectoria se caracterizó por tener un bajo perfil. En sus inicios, la cantante conoció con John Prine, leyenda del folk estadounidense con el cual compartía el estilo de folk con comentario social.
Hasta el fallecimiento de Prine en 2020, los dos artistas colaboraron frecuentemente. Fue Raitt quien lo introdujo en su incorporación al Salón de la Fama de los Compositores y, en su discurso de aceptación del premio anoche, también lo recordó. “Esta historia fue tan simple y tan hermosa para estos tiempos, y la gente ha estado respondiendo a la canción en parte porque amo y todos amamos a John Prine”.
Inspirada por él, Raitt ha incorporado elementos de protesta a su repertorio y a su vida. La artista ha participado en varios movimientos en contra de la energía nuclear y a mediados de los 80 colaboró con el influyente guitarrista Steven Van Zandt en una canción en contra del apartheid en Sudáfrica.
Su habilidad e influencia dentro del revival del viejo blues la ha llevado a ser reconocida por la revista Rolling Stone como una de las 100 mejores cantantes de todos los tiempos y los 100 mejores guitarristas de todos tiempos. La cantante también forma parte del Salón de la Fama del Rock and Roll.
En una rueda de prensa luego del certamen de ayer, la cantautora reflexionó sobre recibir el premio después de una trayectoria tan extensa. “Tener 73 años y obtener una canción del año… cuando apenas soy una compositora. Después de cinco décadas, lo hago porque me encanta. Pero tengo tanta suerte de poder seguir haciendo esto para ganarme la vida. Me estoy pellizcando.”