Eligió esta primera noche por su admiración a Karol G. A las 00.03 de la noche, la puentealtina Pamela Leiva subió al escenario de la Quinta Vergara con un ceñido vestido negro de lentejuelas siendo el primer número de humor en el Festival de Viña 2023. Fue su debut en el principal escenario del país, como parte de una carrera humorística que la ha visto pasar por importantes escenarios, como la Teletón, en 2018, y el Festival de Olmué, en 2020.

La comediante comenzó de inmediato a conquistar al “Monstruo” contando que pidió compartir noche con Karol G, aunque hizo alusión al tema de la edad del público y de hecho se refirió a las mujeres como “las bichotas”, como las fans de la colombiana, en una movida inteligente para ganar la atención tras el arrasador show de la oriunda de Medellín. Es que ellas eran la porción mayoritaria de público y la rutina apeló fundamentalmente a lo femenino.

FOTO: DIEGO MARTIN / AGENCIAUNO.

De ahí siguieron historias y chistes rápidos e ingeniosos, llenos de su impronta popular. Todo en base a su propia biografía (como suele hacerse en el stand-up comedy) y a otros temas, como las familias, la sexualidad, la gordura o la pandemia. “Mi mamá fue la primera diagnosticada con Covid, por ella misma eso sí”, lo que hizo reír al público. De hecho, buena parte de la rutina tuvo que ver con su progenitora.

Incluso, en un momento hizo alusión al conductor de Tu día, José Luis Repenning, a lo que el “Monstruo” pidió un beso entre ambos, pero Leiva se negó diciendo: “Las bichotas somos respetuosas”, ante la mirada un tanto incómoda de Repenning. Más tarde hizo algo similar con el actor Gonzalo Valenzuela, pero este sí le dio un pequeño beso.

De todos modos, el público siempre siguió atentamente su rutina apoyándola, prueba de que el día de la presentación influye mucho, en este caso, una mayoría de mujeres jóvenes que sintonizaron con ella. De hecho, reconoció “estaba un poco nerviosa pero ya se me pasó”. Influyó también que hizo referencias más bien transversales, como un chiste en el que aludió a los clásicos “cubo”, la mala atención en tiendas de ropa y a las teleseries brasileñas.

Foto: Dedvi Missene.

Uno de los momentos cumbres de la rutina, fue cuando hizo alusión a su pasado como participante en el reality 1810 (2009), cuando fue al casting a Canal 13 el mismo día de la PSU y que fumó marihuana poco antes de que le pidieran un test de drogas y que cuando le contó a su mamá, esta le dijo: “¡Hacís puras hueas!”.

Por supuesto, se refirió a su divorcio -tras estar casada un año- y a su movida vida amorosa. “Ahora parezco pasamanos de Metro”.

FOTO: DIEGO MARTIN / AGENCIAUNO.

Hacia la última parte, subió a la cantante Paulina Muñoz, quien apareció con una guitarra. “Hay una canción emblemática que la hemos cantado todos en los karaokes”, y se largó con una versión de Rata de dos patas, de Paquita La Del Barrio, en una alusión a la memorabilia pop y a su mayoritario público femenino, aunque con un cambio de letra al final: “Comparado contigo también lo tiene chico”. Luego sonó Yo no soy esa mujer, de Paulina Rubio y ¿A quién le importa?, de Thalía, con cambios de letra “¿A quién le importa...si ella es lesbiana?”.

Y tal como lo hacen comediantes como Natalia Valdebenito, reivindicó el rol de la mujer en la sociedad, y se largó con una jocosa versión de Fiesta, de Raffaella Carrá, también con cambios de letra con doble sentido.

Foto: Dedvi Missene.

Tras casi una hora, Leiva terminó su rutina entre los aplausos furiosos de sus “bichotas” quienes pidieron la Gaviota de Plata. Ello se entiende porque le habló a un público con el que conectó de inmediato. “Cumplí un sueño”; dijo emocionada. Luego vino un alargue de su rutina y la Gaviota de Oro. “Me gustaría que me dejaran ganarme la segunda gaviota”, dijo. Y el cierre, un bailable junto a Fabrizio y Thiago, los otrora miembros de grupos axe. Primera prueba para el humor en Viña 2023, superada.

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