2019 fue una especie de annus mirabilis para Paloma Mami. Fue ahí que, a los 19 años y con solo dos sencillos bajo la manga, logró repletar el pequeño escenario Lotus del festival Lollapalooza Chile, lo que hacía parecer que el camino al estrellato sería uno más corto y veloz que lo esperado. Para muchos, su breve presentación dio la impresión de que su carrera no tenía techo, y su popularidad sólo seguiría en alza.
Hoy, la cantante llega a la noche inaugural del Festival de Viña 2023 apuntando hacia lo mismo. Eso sí, los tiempos han cambiado. Su último año ha sido mucho menos intenso, como si su carrera hubiera querido bajar las revoluciones y poner un poco de freno de mano tras el despegue fulminante de los inicios.
Después de la aparición en el Lolla, la más vista en la transmisión televisiva del festival, las oportunidades para expandir su popularidad a otros países se multiplicaron: llegaron ofertas para tocar en Argentina, Brasil, y una invitación al famoso festival barcelonés Primavera Sound. En paralelo, hubo negociaciones para que formara parte de Viña 2020, como artista emergente y jurado de la competencia, pero Paloma Mami las rechazó. Con poca experiencia en conciertos y una discografía reducida, se sintió poco preparada.
Sin embargo, como pasó con muchos espectáculos, el COVID-19 pospuso estos debuts en el extranjero. La cantante aprovechó el encierro de la pandemia, que la pilló en Puerto Rico, para trabajar en su álbum Sueños de Dalí. Su lanzamiento en marzo de 2021 fue algo tibio: si bien llevó a apariciones en la TV estadounidense y una nominación por Mejor nuevo artista en los Latin Grammy del mismo año, la situación pandémica impidió aprovechar estos hitos al máximo.
Solo al año siguiente tendría una oportunidad para presentarlo ante un público como el que la recibió en el Lollapalooza, en un elaborado show que cerró el aproblemado Ritual Fest. Tras esta presentación, Paloma volvió a la inactividad, y su lugar como el fenómeno musical chileno emergente pareció ser tomado por las estrellas urbanas Polimá Westcoast y Pailita, futuros colaboradores en el remix de la canción Ultra solo.
“Probablemente, lo que le pasó a Paloma fue que tuvo una explosión y exposición muy rápida, y a veces, cuando todavía no está todo preparado en lo artístico, también hace que te cueste”, opina Martina Orrego, conductora y directora radial de Los 40, para explicar el momento en que se encuentra la carrera de la cantante.
El fichaje para la noche inicial del certamen viñamarino le presenta a Paloma una nueva oportunidad para impulsarse como artista. Cuando se anunció su participación en octubre del año pasado, la artista rompió su silencio en las redes sociales con un mensaje que dejaba entrever planes de un nuevo comienzo: “ME VES MENOS = HACIENDO MÁS. Se que no he demostrado mucho de lo que quiero hacer en esta cultura, pero ya estoy terminando mi segundo disco donde empiezo una nueva etapa”.
Refiriéndose a esto, Orrego agrega: “Yo creo que justamente todos esperamos que este sea su gran regreso. La expectación por verla en vivo es super grande. La presentación en Viña va a marcar un antes y un después en su carrera, y yo creo que va a ser bastante determinante para la impresión con la que se quede el público de Paloma Mami”.