Antes de subirse al escenario de Viña, los comediantes suelen probar sus rutinas en escenarios más chicos para ver lo que funciona y lo que no. Es muy difícil que alguien llegue con una rutina 100% nueva. Así lo hizo Belén Mora, quien agendó una presentación en el XVII Festival Limache Vive el Folklore, que se realizó los días 10 y 11 de febrero en el Estadio Municipal Ángel Navarrete Candia.
Fue en la primera jornada, la del viernes 10, y ante 18 mil espectadores según medios regionales -más que en la Quinta Vergara, que hace 15 mil- cuando “Belenaza” se presentó en un cartel que la incluyó junto a Entremares, Daniel Muñoz y Los Marujos, Princesa Alba y Chico Trujillo.
Sin embargo, su rutina, acaso en un presagio de lo que ocurriría la noche del 21 de febrero en la tercera jornada de Viña, fue bastante accidentada. Se escucharon claras pifias del público que no estuvo conforme con lo que exhibió la nativa de Punta Arenas.
El medio Login Regional comentó: “Belén Mora subió al escenario, tal vez, pensando en la rutina que presentará en el Festival de Viña, la cual rayó en lo chabacano y coprolálico, además de apuntar al tema político, lo cual no fue bien recibido por el público asistente, los que tras algunos minutos, comenzaron a pifiar a la artista la que salió del escenario entre pifias y tibios aplausos. Si lo que presentó en Limache es la base de lo que presentará en Viña del Mar, la comediante deberá revisar su rutina si no quiere vivir en carne propia lo que muchos humoristas ya han experimentado en ese escenario”.
Sin embargo, Mora pareciera no haber tomado nota de la situación; de hecho repitió varios de los gags que lanzó posteriormente en Viña, como lo de Carmen Gloria Arroyo y los tipos de mujeres que van a las reuniones de apoderados. Precisamente en Limache, en esa misma parte donde habla de los paseos de curso -y que generaron la rechifla en el certamen de la Ciudad Jardín, un chiste largo, pesado y extenuante sobre el final- brotaron las pifias.
Eso sí, en la rueda de prensa previa a Viña 2023, dijo que lo que se vio en la ciudad del interior de la región de Valparaíso, es “exactamente lo que voy a hacer en la Quinta”.
Sin ninguna autocrítica, se refirió al hecho en su conferencia de prensa post Viña. “En Limache me pifió un grupo de 30 personas y luego de esas pifias la gente me aplaudió a rabiar. Fue una excelente noche y creo que era irresponsable de mi parte, a una semana, cambiar la rutina”.