El riot grrrl fue más que un género musical; fue un movimiento que empoderó a las mujeres jóvenes para que usaran la música como una plataforma para denunciar las injusticias sociales, la desigualdad de género y el acoso sexual. Las bandas adscritas al riot grrrl surgieron a principios de la década de 1990 como respuesta a las escenas punk y grunge dominadas por hombres, brindando un espacio para que las mujeres se expresaran y crearan música que reflejara sus experiencias.

Aquí, un listado de nombres esenciales

Bikini Kill

Sin Bikini Kill, el género prácticamente no existiría. El grupo se fundó a principios de los 90 en la ciudad de Olympia, Washington. La misma ciudad que vio nacer a los grandes actos del sonido de Seattle.

El grupo se hizo rápidamente conocido por sus shows en los que intentaban procurar un espacio seguro para las mujeres, invitándolas a ocupar las primeras filas, y removiendo personalmente a cualquier hombre que interrumpiera sus shows.

Sleater-Kinney

Originaria de la misma ciudad, Sleater Kinney mezcló composiciones complejas para el noise rock de la época, con letras que abordaban la identidad de género, la sexualidad y las normas sociales impuestas por el machismo.

La canción #1 must have, del disco All hands on the bad one, habla sobre las violaciones en los conciertos y como las mujeres son vulneradas en estas ocasiones masivas. La banda luchó por el cambio, aún cuando muchas veces les dijeron que tenían que salir de la política para poder popularizar su música.

Huggy Bear

Durante su corta trayectoria, que se dio entre los años 1991 y 1994, este grupo británico se autodefinió como “niñas-niños revolucionarios”, haciendo referencia a su composición mixta, y durante todo ese tiempo se rehusaron a ser fotografiados y fotografiadas. Una de sus canciones más conocidas, Her jazz, habla sobre las conductas avasalladoras de los hombres contra las mujeres y cómo se debería hacer una revolución entre ambos.

Son conocidos en la isla británica por su dramática aparición en el programa The word de Channel 4, en la que la banda se molestó en una entrevista con dos modelos apodados ‘The Barbi Twins’ y fueron expulsados del estudio. Más relevante para el público debería ser su lucha por traer riot grrrl al Reino Unido con su irónico estilo vanguardista.

Bratmobile

Bratmobile fue formado por los estudiantes de la Universidad de Oregón, Allison Wolfe y Molly Neuman, creadores de uno de los fanzines de riot grrrl más influyentes de la época, Girl Germs. Inusualmente, el dúo en realidad no tocaba ningún instrumento en el momento en que formaron la banda, sino que interpretaban las canciones que habían escrito a capella. Después de que les aconsejara que escucharan a Ramones en busca de inspiración, la banda descubrió que podían tener un sonido diferente a cualquier otro sin escucharlos.

Con letras mordaces como “no quiero que nadie me diga lo delgada que estoy / No quiero morir por tus malditos dulces”, Bratmobile pronto se convirtió en una parte crucial del movimiento riot grrrl de primera generación.

L7

Formada en Los Ángeles en 1985 por Donita Sparks (voz, guitarra), Suzi Gardner (voz, guitarra), Jennifer Finch (bajo) y Dee Plakas (batería), L7 fue una de las pocas bandas exclusivamente femeninas que lograron el éxito comercial sin dejar de mantener sus principios feministas.

En la canción Pretend we’re dead, la banda hace referencia a la marginalización de la mujer en la sociedad. La solución de la banda fue otra: la unidad.

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