De Guaripolo al dinosaurio Anacleto: diez canciones para celebrar a 31 minutos

Hoy se cumplen 20 años desde que se emitió el primer capítulo de 31 minutos en la televisión abierta. Parte de lo que hizo a 31 minutos una serie tan recordada por generaciones fueron sus canciones.

Compuestas por los creadores de la serie junto al músico de Chancho en Piedra Pablo Ilabaca, los temas sólo elevaron su popularidad. En conmemoración de los 20 años del estreno de la serie, en Culto hemos recopilado algunas de sus canciones esenciales.

Narra la historia de un grupo de hip hop que no deja bailar a su amigo César. Siendo una de las más tocadas dentro del programa, la canción se hizo tan popular que fue incluso grabada por Los Prisioneros en las Raras Tocatas Nuevas que hacía Rock & Pop en 2003.

Narra la historia de dos hermanos que pelean por cuál de ambas opciones es la mejor, tema que algunos fanáticos de la serie aún discuten en redes sociales.

Esta canción también fue versionada por Los Prisioneros en el programa radial; en el final de su cover, Jorge González dice “oye, recojamos los micrófonos”, a lo que el baterista Miguel Taía responde “sí, vamos, recojámolos”; una referencia al recordado episodio en que durante una conferencia de prensa de la banda, el cantante se enojó con algunos periodistas y botó todos los micrófonos.

El origen de la canción aparece en la primera parte del episodio La amenaza siluria, cuando Bodoque se encuentra con Freddy Turbina mientras buscaba a un huemul (en su primera Nota verde). Luego de que Freddy lo acompaña en su búsqueda, Bodoque le sugiere el título del tema para que sea exitoso.

En el disco Yo nunca vi televisión, donde diversos artistas chilenos y mexicanos hacen covers de temas de la serie, la canción es interpretada por Los Bunkers.

Inspirada en la música de Tom Petty, narra la conmovedora historia del Dinosaurio Anacleto (de nombre real Roberto), que luego de la extinción de su especie se quedó solo y se convirtió en una figura de la farándula. A pesar de tenerlo todo, no es feliz.

Originalmente la canción iba a decir “Prefería el mundo cuando no había ciudades / Y yo me tiraba en cualquier parte a descansar” en vez de “Por eso un buen día me vine a vivir al campo / A cambiar la fama por amigos de verdad”. La letra fue cambiada por considerarse demasiado triste.

Para demostrarle a Patana que es un artista, Guaripolo canta una canción de su autoría que es muy, pero muy mala. Los versos en inglés al final del track son una parodia a la canción Pasajero de la luz de Fernando Ubiergo.

Canción favorita de los creadores del show, Pedro Peirano y Álvaro Díaz. Narra la historia de un niño que nunca se da por vencido.

Compuesta para la Mangueratón, una jornada solidaria para evitar que el programa quedara en bancarrota, suerte de Teletón de 31 Minutos, esta canción es todo un himno y un llamado a mantenerse optimista.

En este tema, el mayordomo zombie del programa demuestra que no sólo es un excelente mayordomo, sino también un muy buen cantante . Según la enciclopedia de la serie, el final hace referencia a la canción Day-O (The banana boat song) de Harry Belafonte.

Una niña interpretada por Jani Dueñas nos cuenta la historia de Norberto y Raquel, dos compañeros de curso parecidos a Olivia Newton-John y John Travolta que, aunque no quieren admitirlo, todo el mundo sabe que son pololos.

El tema más icónico, que empezó los episodios de todas sus temporadas y sus conciertos en vivo. Tramposo como siempre, Tulio uso la canción en los premios Policarpo Top Top Top, para ganar sin estar nominado y sin avisarle a nadie.

Esta intro del programa ha sido interpretada por La Sonora de Tommy Rey. También existe una versión triste, cantada en un episodio de la tercera temporada por Tulio, para revivir a sus amigos convertidos en piedra.