Por ausencia o por alguna clase de disfunción, los padres y madres suelen ejercer una enorme influencia en la identidad de los superhéroes. Barry Allen / Flash (Ezra Miller) no es la excepción. En el caso del oriundo de Central City eso se manifiesta a través de una doble pérdida: su mamá falleció cuando era niño y su papá está en prisión porque la justicia determinó que había sido el autor de su homicidio.
Tomando como principal inspiración el cómic Flashpoint (2011), la película dirigida por Andy Muschietti imagina que Allen llega a una dimensión en que sus dos padres están vivos y existe una versión más joven de sí mismo. Ese bosquejo de historia impulsó al realizador argentino a buscar una intérprete que encarnara a la progenitora del personaje, Nora Allen.
No tardó en pensar en Maribel Verdú, en sus palabras, “una actriz que he admirado toda la vida”. “En un segundo va a tener a la audiencia en el bolsillo, con la sonrisa y con la calidez que exuda”, sostiene Muschietti en una conferencia a la que asiste Culto.
No la conocía personalmente; tampoco estaba al tanto de su disposición a actuar en inglés, por lo que se asomó a lo que define como “un salto al vacío”. “Fuimos hablando de a poquito y al final ella dio un salto al vacío, me parece”, señala.
El ofrecimiento consistía no sólo en encarnar a la mamá del superhéroe, sino que en dar vida a la hebra emocional del filme, una entrañable relación madre e hijo que se fracturó prematuramente.
En un comienzo, Verdú tuvo algunas sospechas. “Andy me decía: vas a ser la mamá de Barry, de verdad que es la base de toda la película. Yo pensaba: este cómo es de adulador, argentino”, indica en la misma instancia, donde también desliza que su fichaje podría haber generado algo de resistencia. “Yo decía: Andy, ¿sabes dónde te estás metiendo? Vas a ver, te van a poner a parir”, agrega.
Pero terminó sucediendo: la intérpretes de cintas como Y tu mamá también (2001) y El laberinto del fauno (2006) se incorporó al elenco liderado por Ezra Miller y también compuesto por Sasha Calle (Supergirl), Michael Shannon (Zod), Michael Keaton (Batman) y Ron Livingston (Henry Allen).
“La madre es la universidad de todas las personas. Es de quien uno bebe. A quien uno quiere imitar. Tú quieres aprender de tu madre, quieres crecer a su lado, quieres de sus enseñanzas”, reflexiona Verdú.
“Hay madres de todo tipo, obviamente, pero yo creo que Nora Allen, en este caso, es esa madre que todos desearíamos tener, que todos soñamos con tener”, señala sobre su personaje, a quien define como “una mujer comprensiva, terrenal, divertida, alegre, tierna, cómplice, con un sentido del humor increíble. Es un sueño de madre”.
Con su inclusión en el filme, Muschietti también buscaba realizar un gesto a la comunidad hispanohablante. “Los latinos compartimos ciertos valores de familia que son muy importantes. Siendo una película que tiene como temas la familia, la pérdida y el amor familiar, para mí era muy importante transmitir esa calidez a todo trapo. No puedes ir de a poquito, tienes que ir a todo trapo, sobre todo porque es una película de (más de) dos horas”, expresa el cineasta.
Durante el último año, Ezra Miller ha sido foco de controversias fuera de la pantalla (no concedió entrevistas y sólo acudió a la premiere de The Flash). Sin embargo, en el set todo parece haberse desarrollado en un ambiente de cordialidad.
“Él (Andy Muschietti) me dijo que sólo quería que le pusiera todo el corazón, la ternura y la complicidad que pudiera aportar. Y aporté todo lo que podía de ternura, de bondad, de alegría, de buen rollo y de complicidad. Y tuve la suerte de tener delante la mirada de Ezra (Miller). Su humor, su cariño, y esa complicidad que tuvimos los dos de amarnos, de sentirnos madre e hijo”, cuenta.
Tras ver la cinta por primera vez, Verdú piensa que “funcionó todo”. También concluye que “esta película no es una película, son muchas películas en una. Es verdad. Es comedia, es drama, es acción, es violencia, es desesperación, es todo. Tienes todo en una película. Muchas en una”.