Alabado por la crítica y apreciado por el público, John Wick 4 es uno de los grandes fenómenos cinematográficos del año. Sin embargo, la cuarta parte de la saga de acción también tiene detractores.
Oliver Stone se reconoció como uno de ellos. Invitado al Festival de Cine de Transilvania (Rumannia) para recibir un premio a la trayectoria, el director de Wall Street (1987) expresó su rechazó al largometraje de Chad Stahelski, el que, según contó, vio durante un vuelo.
“Creo que el filme es repugnante más allá de lo creíble. Desagradable. No sé lo que la gente está pensando”, sostuvo en el certamen.
“(Keanu Reeves) mata a 300 o 400 personas en la maldita película. Y como veterano de combate, debo decirte que ninguna de esas muertes es creíble. Entiendo que es una película, pero se ha convertido más en un videojuego que en una película. Se ha perdido el contacto con la realidad. Al público quizá le gusten los videojuegos. Pero yo me aburro”, expuso.
“¿Cuántos autos se pueden chocar? ¿Cuántas acrobacias puedes hacer? ¿Cuál es la diferencia entre Rápidos y furiosos y cualquier otro filme? Es solo una cosa tras otra. Ya sea un personaje superhumano de Marvel o simplemente un ser humano como John Wick, no hay ninguna diferencia. No es creíble”, concluyó.
Ganador de dos Oscar a Mejor director (por Pelotón y Nacido el 4 de julio), Stone aprovechó su visita a Rumania para presentar Nuclear now, un documental en que se plantea a favor de la energía nuclear.
“Ninguna empresa quería hacerlo”, reveló sobre el complejo proceso de financiamiento del proyecto, junto con asegurar que en Hollywood “les asusta la energía nuclear”.