El cantante y compositor brasileño Joao Donato, importante figura de la bossa nova, murió hoy a los 88 años en Río de Janeiro.

“Hoy el cielo de los compositores amaneció más feliz: Joao Donato fue para allí para tocar sus lindas melodías”, informaron las redes sociales del artista, en las que también se dijo que el velatorio será realizado en el Teatro Municipal de Río de Janeiro.

El cantante pasó 26 días internado en un hospital en junio, según informó él mismo a finales del mes pasado sin especificar los motivos.

El pasado 27 de mayo dio uno de los últimos shows de su vida, en el Teatro Nescafé de las Artes de Santiago.

Nacido en 1934 en el estado de Acre, en la región amazónica, empezó a tocar el acordeón desde muy joven y, tras mudarse junto a su familia a Río de Janeiro, aprendió piano y entró en contacto con el círculo de músicos en que se estaba fraguando la ‘bossa nova’.

Días en Nueva York: Joâo Donato y Tom Jobim en 1964

Donato se convirtió en uno de los precursores de este género musical suave y melódico, colaborando con otros exponentes del movimiento como Joao Gilberto, Tom Jobim y Vinicius de Moraes a lo largo de una carrera que se extendió durante más de 70 años .

A finales de los 50, vivió una temporada en Estados Unidos, donde entró en contacto con el jazz y los ritmos caribeños, géneros que luego enriquecerían su estilo musical.

Entre sus canciones más conocidas destacan Amazonas, La rana y Cangrejo, convertidas en clásicos de la música popular brasileña.

En 2010, Donato ganó un Grammy Latino por el mejor álbum de jazz latino y en 2018 recibió el Premio de la Música Brasileña por el mejor álbum electrónico.

“Me gusta que la música contenga una cierta nostalgia”, declaró hace unos años en una entrevista para el canal TV Brasil, en la que también afirmó que la música era, para él, tan “imprescindible” como el agua.