Siempre interesado en repasar la historia de The Beatles, Sir Paul McCartney se refirió a un episodio controversial: la presencia de Yoko Ono, la pareja de John Lennon, en las sesiones de grabación del grupo. Para “Macca”, aquello “fue una intromisión en el ámbito laboral”.
McCartney se refirió al tema en un nuevo capítulo de su nueva serie de podcasts de 12 episodios, titulada McCartney: A Life In Lyrics. Allí comentó cómo los Beatles se tomaron la presencia de Yoko Ono en el estudio, una vez que oficializó su relación con Lennon.
Lennon conoció a Yoko en la apertura de una exposición en la Galería Índica, de Londres, en 1966. Tiempo después, comenzaron su romance. Allí John la comenzó a llevar al estudio a diario. “John y Ono se habían juntado y eso seguramente tendría un efecto en el grupo”, dijo McCartney.
McCartney recordó lo que más molestaba al grupo. “Cosas como que Yoko estuviera literalmente en medio de la sesión de grabación [eran] algo con lo que tenías que lidiar”, pero igualmente marcó un matiz. “La idea era que si John quería que esto sucediera, entonces debería suceder. No hay ninguna razón por la que no”.
Según “Macca”, los Fab Four trataron de llevar la situación como pudieron. “Todo lo que nos perturba, es perturbador. Lo permitiríamos y no armaríamos ningún escándalo”, apuntó. “Y al mismo tiempo, no creo que a ninguno de nosotros le haya gustado especialmente. Fue una interferencia en el lugar de trabajo. Teníamos una forma de trabajar. Los cuatro trabajamos con George Martin. Y eso fue básicamente todo. Así que, sin ser muy conflictivos, creo que simplemente lo reprimimos y seguimos adelante”.
En general, McCartney ha mantenido esa mirada respecto a la presencia de la artista japonesa en el estudio. Tal como se puede ver en el documental Get Back, efectivamente Yoko se sentaba junto a Lennon, pero procuraba mantenerse en un discreto segundo plano.