No podía anunciarlo de otro modo, sino que a través de un libro. De acuerdo a lo publicado por la agencia de noticias EFE, el escritor peruano Mario Vargas Llosa (87) informó en una nota dentro de su última novela, Le dedico mi silencio, que se retirará de la literatura luego de escribir un ensayo sobre el filósofo francés Jean-Paul Sartre.
“Ahora, me gustaría escribir un ensayo sobre Sartre, que fue mi maestro de joven. Será lo último que escribiré”, anotó Mario Vargas Llosa al término de la nota al final de su libro.
El Premio Nobel de Literatura 2010 contó que terminó de escribir el borrador de su novela en Madrid, en abril de 2022, comenzó a corregirla en mayo y que, desde entonces hasta final de ese año, ha estado haciendo pequeños cambios.
El libro cuenta una historia ambientada en el Perú de ‘Toño’ Azpilcueta, un experto de música criolla que descubrió a su guitarrista más talentoso, ‘Lalo’ Molfino. En el transcurso del relato, descubre que la habilidad de este va de la mano con sospechas que tenía y que, además, su amor por los valses, marineras, polkas y huaynos peruanos tiene que ver con un motivo social.
Lo último que llegó a Chile del autor peruano fue el volumen Un bárbaro en París. Textos sobre la cultura francesa. En sus páginas, pasea por autores clásicos como Molière, Flaubert, Víctor Hugo o Simone de Beauvoir. No es casual, el hombre se ha declarado un ferviente admirador de las letras de ese país. Incluso, ingresó oficialmente a la Academia Francesa en febrero de este 2023. En traje de ceremonia, al estilo del siglo XIX, como un Flaubert cualquiera. De esa forma, el autor de Pantaleón y las visitadoras hizo historia como el primer autor en lengua castellana en ser ingresado en la tradicional institución.
En su discurso, pronunciado en francés, se refirió al rol de la literatura en las democracias, criticó a los regímenes autoritarios (en particular a Vladimir Putin) y celebró la rica cultura literaria del país europeo. “Ha hecho soñar al mundo entero con otro mundo mejor”, aseguró. “La literatura francesa fue la mejor y sigue siéndolo. La más osada, la más libre...la que se insubordina a la actualidad, la que regula y administra los sueños de los seres vivos”.
Mario Vargas Llosa pasó a ocupar de manera oficial el sillón número 18 de la Academia, el que correspondió al filósofo e historiador Michel Serres, hasta su muerte en 2019. Según el organismo, fundado por el Cardenal Richelieu en 1635, su ingreso fue aprobado por 18 votos a favor de los 22 miembros electores de la Academia, y solo recibió el voto en contra de Frédéric Vignale; además de dos abstenciones y uno en blanco.
La noticia de su llegada se dio no sin polémicas, porque la institución pasaba por alto dos de sus normas. La primera, admitir a un escritor que no escribe en francés; la segunda, a un candidato mayor de la edad tope de 75 años, ya que el peruano tenía 85 en ese momento. Además, un grupo de intelectuales franceses publicó una carta en el diario Libération en el que se manifestaron contrarios al nombramiento del autor de La guerra del fin del mundo. “Amenaza con legitimar posturas que pisotean los valores de la democracia a los que Francia quiere asociarse, como la libertad de expresión, la aceptación de resultados de sufragios y el derecho a defender causas sin arriesgarse a perder la vida”, señalaron.
También ha tenido inconvenientes de salud. En julio de este año debió ser internado en Madrid debido a que se contagió de Covid-19, por segunda vez en menos de dos años. La primera, fue en 2022. De ambas se recuperó de manera satisfactoria. En la FIL Buenos Aires (Feria del Libro de Buenos Aires) de ese año, comentó cómo fue su vivencia al respecto. “El Covid fue una experiencia desagradable porque comencé a sentir mucho frío en las piernas y, de pronto, comencé a perder la respiración, a ahogarme, a respirar con mucha dificultad”, indicó. Además, comentó que debió ir a la clínica por problemas respiratorios. “Fue una experiencia de solo 24 horas, pero muy angustiante. Recuerdo como una liberación cuando me colocaron el oxígeno”.
Además, en el plano personal, en diciembre del 2022 se puso fin al vínculo que mantenía con la socialité Isabel Preysler tras un romance de ocho años. “Mario y yo hemos decidido poner fin a nuestra relación definitivamente. No quiero dar ninguna declaración más y agradezco a los medios de comunicación que nos ayuden en esta decisión”, afirmó escueta la oriunda de Manila, Filipinas.
Con su retiro, Vargas Llosa pondrá fin a una carrera literaria que lo vio incursionar principalmente en la novela, pero también en el ensayo, el cuento, la dramaturgia y hasta en el periodismo. Debutó en 1963 con La ciudad y los perros. Luego, fue el turno de La casa verde (1966), con los que empezó a tener mayor reconocimiento. Posteriormente, vino la que quizás es su novela más reconocida, Conversación en La Catedral (Seix Barral, 1969). A contar de ahí podemos otros títulos relevantes: Pantaleón y las visitadoras (Seix Barral, 1973) o La guerra del fin del mundo (Seix Barral, 1981).
Vargas Llosa obtuvo el Premio Nobel de Literatura en 2010, siendo -hasta la fecha- el último latinoamericano en obtenerlo. También le fueron concedidos otros importantes reconocimientos, como el Premio Internacional de Novela Rómulo Gallegos, en 1967; el Premio de la Crítica de Narrativa Castellana, 1967; el Premio Nacional de Cultura (Perú), 1967; el Premio Príncipe de Asturias de las Letras, en 1986; y el Premio Cervantes, de 1994.
Le dedico mi silencio, publicada por Alfaguara, llegará a las librerías el próximo 26 de octubre, en España, según se indicó. A Chile llegará en noviembre, según confirman a Culto desde Penguin Random House.