David Bowie fue uno de los artistas del rock más influyentes del siglo pasado. Con éxitos como Under Pressure o Heroes, el cantante británico se consolidó como una leyenda musical, destacando por lo conceptual de su obra, su singular voz y sus extravagantes atuendos.
Para su cumpleaños número 50, el 8 de enero de 1997, el Duque Blanco realizó uno de sus conciertos más icónicos. Repletó el Madison Square Garden de Nueva York, con un público de treinta mil personas. Además de entregar un show de calidad espectacular, el artista estuvo acompañado de varias figuras fundamentales de la industria musical.
En cerca de dos horas, el llamado “Camaleón del Rock” interpretó 22 canciones, comenzando por Little Wonder. Algunas de las colaboraciones más icónicas que dejó la jornada fueron Scary Monster con Black Francis –vocalista de Pixies–, Hallo Spaceboy y Seven years in Tibet con Foo Fighters, Queen Bitch con Lou Reed –con quien interpretó tres canciones más– y I’m Afraid of Americans con Sonic Youth.
El concierto incluyó al público coreando Happy Birthday, momento iniciado por la bajista de Bowie, y finalizó con una impresionante presentación de Moonage Daydream.
Posterior al espectáculo –que se encuentra disponible en Youtube–, el artista cumpleañero posó para una fotografía con varios de los invitados de la noche, entre los que se estaban Robert Smith de The Cure, Billy Corgan de The Smashing Pumpkins, Dave Grohl y Pat Smear de Foo Fighters, Brian Molko y Stefan Olsdal de Placebo, además de Sonic Youth en pleno, con Thurston Moore, Kim Gordon, Lee Ranaldo y Steve Shelley, entre muchos otros. Hasta hoy, una de las fotos más valiosas del periodo.