La ministra del Interior y Seguridad Pública, Carolina Tohá, abordó este miércoles la polémica que se suscitó por la invitación al cantante mexicano Peso Pluma al Festival de Viña del Mar, asegurando que al gobierno le genera preocupación el seguimiento a canciones que promueven la “narcocultura”.
La secretaria de Estado abordó la invitación del artista, luego de que tras las críticas del sociólogo Alberto Mayol a su participación en el Festival de Viña del Mar, diversas personalidades del mundo político reaccionaran, pidiendo que sea retirado del evento.
En el texto, publicado en BioBioChile, el académico de la Universidad de Santiago cuestiona la participación de La Doble P en el certamen internacional, ya que, según consigna, este reivindica la cultura del narcotráfico.
Desde el Congreso, la titular de Interior aseguró que “como gobierno y como autoridades comprometidas con la seguridad, nos preocupa que exista tanto seguimiento de canciones que promueven la cultura narco y que muchas veces también promueven una visión bastante despectiva hacia las mujeres y reproducen paradigmas muy discriminatorios en materias de sexismo”.
“Nos preocupa independiente del Festival de Viña”, dijo la titular de Interior, añadiendo que “el Festival y todo evento tiene la libertad de invitar o no invitar artistas y cuando no se invita a un artista no significa que se le esté censurando. Cuando se invita a un artista significa que se le quiere promover y hay artistas que a veces uno no quiere promover, particularmente aquellos que están detrás de la cultura narco”.
“Nosotros no somos organizadores del evento, lo que queremos decir es que quien invita a un artista, toma una decisión respecto de promover su arte, su trabajo y puede también no tomarla”, aseguró la autoridad, respecto al rol de la Municipalidad de Viña del Mar, liderada por la alcaldesa RD Macarena Ripamonti.
Asimismo, Tohá aseguró que la promoción a la “narcocultura” por parte de cantantes urbanos “es un tema muy sensible y nos preocupa más allá del Festival. Este debería ser tema de inquietud y de debate en la sociedad chilena, porque el tema es que todos seamos conscientes de lo que se escucha también, no solo de que no se escuche y haya conciencia del mensaje”.