El escritor Liu Cixin publicó el primer libro en 2006, alcanzando una gran recepción en China. Sólo después de que transformó la historia en una trilogía se concretó la posibilidad de que su obra se tradujera al inglés, saliendo al mercado en ese idioma en 2014 y ganando el Premio Hugo a la Mejor novela en 2015.

Hollywood no dudó y fue a la caza del último fenómeno de la literatura de ciencia ficción. De todos los interesados en esa carrera el ganador terminó siendo Netflix. En septiembre de 2020, un año después de firmar un acuerdo de exclusividad con ambos, la plataforma de streaming confirmó que David Benioff y D. B. Weiss (Game of thrones) se desempeñarían como creadores de una adaptación en formato serie de los libros de Cixin, en colaboración con el guionista Alexander Woo.

Foto: Ed Miller/Netflix © 2024

“Tengo el mayor respeto y fe en el equipo creativo que adapta El problema de los tres cuerpos para el público de televisión. Me propuse contar una historia que trasciende el tiempo y los límites de las naciones, las culturas y las razas; una que nos obliga a considerar el destino de la humanidad en su conjunto”, definió en ese momento el autor.

Casi cuatro años después de ese anuncio, El problema de los 3 cuerpos llega a Netflix con una primera temporada de ocho capítulos (ya disponible), convertida en una de las producciones más ambiciosas del streaming de 2024. La historia arranca en 1967 en China. En medio de la Revolución Cultural, una joven llamada Ye Wenjie ve cómo su padre, un profesor de física, es sometido a vejámenes para que confiese y termina siendo asesinado. El posterior actuar de la muchacha repercute décadas después en el planeta, cuando el mundo se entera de que una raza alienígena invadirá la Tierra en 400 años más.

En el presente la serie sigue a varios personajes con sus propias agendas: Da Shi (Benedict Wong), un exoficial de inteligencia transformado en detective que investiga varias muertes al interior de la comunidad científica; un jefe de inteligencia británico conocido como Wade (Liam Cunningham) que reúne a un grupo de cinco físicos de Oxford para que lo ayuden en sus planes, y a un ambientalista (Jonathan Pryce) que lidera un culto que desea que los extraterrestres colonicen la Tierra.

La historia avanza en sus diferentes subtramas y añade capas y conceptos propios de la complejidad de la historia creada por Liu Cixin (ojo: spoilers a continuación). Al final del quinto capítulo toda la humanidad ya se ha enterado del cataclismo que enfrentará el planeta con la inminente invasión de los San-Ti. El mensaje es claro y, al comienzo del siguiente episodio, las consecuencias son visibles: pánico masivo, despliegue de los ejércitos para contener las protestas, una declaración de la secretaria general de la Organización de las Naciones Unidas.

Foto: Courtesy of Netflix © 2024

La producción describe ese caos mundial a través de noticiarios, que muestran imágenes de disturbios en distintos lugares del mundo. Se aprecian barricadas, gases lacrimógenos y fuerzas de orden en las calles. Para ilustrar ese punto, la serie integra imágenes del mundo real, incluyendo un registro de una aparición pública de Joe Biden, también presidente de Estados Unidos en la ficción.

Curiosamente, aparecen dos imágenes ligadas a Chile: la primera es una toma aérea de la Iglesia San Borja en llamas (probablemente del año 2019, cuando sufrió un incendio en medio del estallido social) y la segunda es de militares en los alrededores de Plaza Baquedano durante la misma época. Eso sí, no hay mención a nuestro país ni por parte de los noticieros ni por parte de los personajes de la trama.

El recurso apunta a reflejar el desconcierto mundial ante la noticia de una colonización ajena a todo lo que conocemos y a acentuar la escala que Benioff, Weiss y Woo intentaron imprimirle a la historia original. Aunque la primera temporada transcurre mayoritariamente en Reino Unido, tiene algunos pasajes en China, Estados Unidos y Panamá.

“Nuestra directiva ha consistido en hacer una serie global desde el principio, y el carácter chino de la filosofía del libro se conserva en algunos de los personajes”, apuntó Alexander Woo a The Hollywood Reporter.

Foto: Ed Miller/Netflix © 2024

La producción de Netflix ha gustado a parte importante de los críticos. “El problema de los 3 cuerpos pertenece a una raza demasiado atípica: el entretenimiento convencional que lleva a sus espectadores por corredores especulativos vigorizantes y originales”, apuntó The New Yorker, asegurando que “combina preguntas teóricas embriagadoras con espectáculo y corazón genuinos”. “Los creadores logran extraer la urgencia de la historia sin lobotomizar el material original”, señaló la revista Time.

Sin embargo, otros expertos se mostraron más distantes con la propuesta. “No puede deshacerse del todo de la fría abstracción que estaba en el corazón de los libros y que es venerada por sus fanáticos”, opinó The Guardian.

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