Juan Miguel Godoy, más conocido como Yin Yin, fue el hijo de Gabriela Mistral –Nobel de Literatura en 1945–. Por muchos años, y debido a que la poeta también lo difundió de esa manera, se consideró que el niño era su sobrino, pero luego del fallecimiento de la escritora, Doris Dana, su benefactora, confirmó en un reportaje televisivo que en realidad el parentesco era de madre e hijo.
Yin Yin nació el 1 de abril de 1925, en Barcelona; hoy estaría cumpliendo 99 años. En su momento, se dijo que era hijo de la española Marta Muñoz Mendoza y Carlos Miguel Godoy Vallejos –supuesto medio hermano de Mistral, cuyo verdadero nombre era Lucila Godoy Alcayaga–.
Cuando la supuesta madre murió por tuberculosis, el niño fue entregado a Gabriela Mistral y Palma Guillén, secretaria de México con quien tenían una cercana relación. Ambas firmaron entonces documentos que acreditaban su tutela. Yin Yin se suicidó a la edad de 18 años, en Brasil.
18 años, varios países
Nació en Barcelona y se mantuvo los primeros años de vida ahí. En 1929 comenzó a vivir con Mistral –desde ese momento se conocen los primeros registros con ambos en el mismo lugar–. Sin embargo, debido a los muchos viajes que tenía que realizar por trabajo, al igual que Guillén, pasó gran parte de su infancia en Italia, siendo educado por institutrices.
Vivió poco más de un año en Madrid, entre 1934 y 1935, cuando se trasladaron a Lisboa. En esta última ciudad vivió solo con Mistral. Posteriormente, hasta 1938, se mudó con Guillén a Copenhagen. Ante el inminente comienzo de la Segunda Guerra Mundial, como medida de respaldo, Yin Yin se va nuevamente con Mistral, esta vez a Niza, en el sur de Francia.
Se consideraba que sus años en Francia fueron fundamentales en su crecimiento: hablaba el idioma y le gustaba la cultura. En 1940, debido al peligro que se expandía respecto al conflicto mundial, decidieron mudarse nuevamente, esta vez al continente americano, con destino a Brasil.
En ese tiempo solo residió con Mistral, y nunca logró adaptarse a su nuevo entorno. El 14 de agosto de 1943, a los 18 años, se suicidó ingiriendo arsénico. De acuerdo a relatos posteriores emitidos por la poeta, Yin Yin había sufrido bullying por parte de personas de su edad, mientras que también era acosado por simpatizantes nazis a través de actos xenófobos.
Dejó una pequeña carta: “Querida mamá, creo que mejor hago en abandonar las cosas como están. No he sabido vencer. Espero que en otro mundo exista más felicidad. Cariñosamente tu Yin Yin. Un abrazo a Palma.”
Yin Yin, en la literatura
En 2015, la editorial universitaria Diego Portales publicó un libro a cargo de Pedro Pablo Zegers Blachet, que recopila las oraciones de Mistral, posterior al suicidio de Yin Yin. También, algunos poemas que se asocian en temáticas y conceptos a su relación con el joven, además de cartas entre Mistral y Guillén en los años previos, y algunas posteriores al fallecimiento.
“Completan el volumen un cuento escrito por Juan Miguel, y una serie de documentos de filiación, visas, certificados, etc., que cierran el capítulo sobre la supuesta maternidad de Gabriela Mistral”, dice la sinopsis.
Es una recopilación de casi 300 páginas, que recupera pensamientos, sueños y deseos que Mistral dejó por escrito, sobre Yin Yin, en distintas etapas de su vida. En las cartas de la década de 1940, poco antes de que recibiera el Nobel, se aprecia cómo la adolescencia y los cambios obligatorios de domicilio, debido a la guerra, provocaron cierta rebeldía en el joven.
Quería ser aviador, pero las dos mujeres a su cargo conversaban a través de cartas que tardaban tres semanas en llegar a destino, que él no tenía la contextura ni la agilidad física para ese trabajo, repetían constantemente que no se trataba solo de volar.
Al mismo tiempo, se referían al poco control financiero que Yin Yin mantenía y a ciertas amistades, las que ambas mujeres rechazaban. El consumo de alcohol también se suma a los problemas de la época, haciendo que las tensiones aumentaran.
Oraciones a Yin Yin
La mayor parte del texto corresponde a oraciones escritas por Mistral. La poeta era creyente en la religión, y para tal creencia, el suicidio era pecado. El alma de Yin Yin estaría en el limbo, esperando a ser juzgada por sus acciones en vida. Es por esto, que la chilena radicada en México escribe una y otra vez en sus distintos cuadernos, oraciones que imploran por la salvación y el perdón de Juan Miguel.
En las últimas páginas, se encuentra también un relato escrito por el mismo joven, quien en más de una ocasión expresó la intención de convertirse en escritor. No se sabe si ese texto corresponde a un cuento o a un fragmento de novela, pero es lo único que se ha recuperado, además de sus cartas.
Gabriela Mistral finalmente recibió el Nobel de Literatura en 1945, a menos de dos años del sensible suceso que marcaría sus escritos, y el resto de su vida.