Megalopolis es la película que ha obsesionado a Francis Ford Coppola durante décadas. Se le ocurrió durante el infernal rodaje de Apocalipsis ahora (1979), se quedó con las ganas de filmarla durante los 90 debido a problemas financieros y luego, cuando el proyecto avanzaba a buen ritmo, el ataque a las Torres Gemelas volvió inviable que cualquier tercero apostara por la historia, una ficción que imagina a Nueva York después de una catástrofe.
Cuando volvió a revisar el guión y se convenció de que nadie más que él mismo invertiría en la cinta, Megalopolis volvió a la vida en 2019. Vendió parte de sus propiedades vitivinícolas para financiar el elevado presupuesto y reunió a un elenco plagado de grandes nombres (Adam Driver, Nathalie Emmanuel, Giancarlo Esposito, Jon Voight, Laurence Fishburne, Aubrey Plaza, Dustin Hoffman). Ahora, después de décadas de espera, está lista. Su estreno está considerado para este año y los peces grandes de Hollywood y los amigos de Coppola ya la vieron.
El pasado jueves 28 de marzo, en el Universal Cinema AMC ubicado en CityWalk Hollywood, se realizó una exhibición a la que acudieron Al Pacino, Nicolas Cage, Anjelica Huston, Andy García y Sean Penn, además de los máximos ejecutivos de la industria.
Según los testimonios que han circulado, todos los asistentes se encontraron con una película desafiante, plagada de ideas y con reflexiones sumamente contemporáneos. Su trama sigue a tres personajes principales luego del colapso de una urbe en decadencia: un ambicioso e idealista arquitecto llamado Cesar (Adam Driver); Frank Cicero (Giancarlo Esposito), el alcalde de la ciudad, quien no comparte su visión, y Julia (Nathalie Emmanuel), la hija del político, quien se encuentra al medio del conflicto entre ambos hombres.
La cinta también plantea un espejo entre los desafíos que enfrenta la urbe de la trama y la civilización romana. “El destino de Roma acecha a un mundo moderno incapaz de resolver sus propios problemas sociales en esta historia épica de ambición política, genio y amor peligroso”, consigna la sinopsis oficial.
El director estadounidense Gregory Nava (Selena) aceptó compartir sus primeras impresiones con el sitio IndieWire, describiéndola como “una obra maestra brillante y visionaria”. “Me dejó tan abrumado que no pude hacer nada durante el resto del día más que pensar en Megalopolis y sentir su mensaje poderoso y edificante. Francis ha llevado el cine a un nivel completamente diferente: toda la experiencia fue profundamente conmovedora”, agregó.
“El nuevo filme de Coppola está repleto de ideas que fusionan el pasado con el futuro, con una fábula épica y sumamente visual que se reproduce perfectamente en una pantalla Imax”, detalló Mike Fleming, coeditor jefe de Cine del portal Deadline.
El medio Puck recogió otro tipo de reacciones. “No tiene perspectivas comerciales”, expresó un asistente. Otra persona consultada indicó que “es increíble lo loca que es”. “Todas las personas con las que hablé estuvieron de acuerdo en que será difícil de vender”, sintetizó el portal.
Ese resumen apunta a la nueva etapa que le espera al largometraje de Coppola: encontrar un distribuidor interesado que, en el mejor de los casos, satisfaga los deseos de su director, quien busca que le garanticen un estreno mundial en salas Imax.
A la primera función asistieron los representantes de Warner Bros., Sony Pictures, Netflix, NBCUniversal, Paramount, Searchlight Pictures y Amazon MGM Studios, por lo que seguramente las negociaciones ya están en curso.
“Necesitamos ser tan creativos en el acuerdo como lo fue Francis al hacer esta película. La gente me ha dicho que la película no se parece a nada que hayan visto antes, y tal vez ahí es donde sea necesario llegar a un acuerdo”, explicó Barry Hirsch, abogado de Coppola y productor de la cinta.
Una cosa se da casi por hecho: aunque hay festivales interesados en recibir el estreno mundial de Megalopolis (Cannes, Venice, Telluride, Toronto), no participará en ningún certamen antes de cerrar un acuerdo de distribución.